BUENOS AIRES, Setiembre 20, (PUNTO CERO) En los últimos cinco años, en la Universidad Nacional de La Plata se triplicó el número de proyectos que anualmente se presentan al Programa de Promoción de Extensión Universitaria de esta casa de estudios. Este año, alumnos, docentes e investigadores realizaron un total de 157 propuestas extensionistas de todas las unidades académicas, incluido uno propuesto por el Bachillerato de Bellas Artes. La cifra supera en 40 las inscriptas el año pasado y 108 más con respecto a la convocatoria 2003. En 2007, la UNLP espera destinar 650 mil pesos para el financiamiento de estas iniciativas que vinculan la actividad académica con la sociedad.
A partir de la primera gestión del Presidente Gustavo Azpiazu, la UNLP comenzó a debatir la necesidad de otorgar a la Extensión Universitaria una jerarquización equivalente a la docencia y a la investigación, como una de los tres pilares sobre los que se asienta la actividad Universitaria. Por ejemplo, en 2005 se habilitó la posibilidad de que los proyectos sean dirigidos y coordinados por profesores titulares, asociados, adjuntos (ordinarios o interinos) y auxiliares docentes (ordinarios e interinos) rentados que acrediten experiencia en extensión. Hasta ese momento, sólo podían cumplir ese rol los profesores adjuntos y titulares, un requisito formal que dejaba afuera a profesionales con destacada trayectoria académica y experiencia en el campo de la extensión.
El impulso al desarrollo de la extensión universitaria se vio también reflejado en el progresivo aumento de las partidas presupuestarias destinadas a subsidiar los proyectos: en 2003 se asignaron 250 mil pesos; en 2004 fueron 350 mil; en 2005, 450 mil; y en 2006 se destinaron 470 mil pesos. Ahora, el proyecto de presupuesto que será sometido a votación en la próxima reunión del Consejo Superior prevé una partida de 650 mil pesos, es decir, un incremento del 38% con respecto al año pasado.
El presidente de la Universidad, Gustavo Azpiazu, explicó que “la promoción de las actividades de extensión es uno de los ejes prioritarios de esta gestión, y de hecho esta temática tiene un rol protagónico en los actuales debates sobre la reforma de nuestro Estatuto, e incluso en las discusiones que a nivel nacional se plantean en torno a la reforma de la Ley de Educación Superior”. En este sentido agregó que “las tareas de extensión son una herramienta fundamental para el fortalecimiento de la relación entre las universidades y la sociedad”.
Ahora, los 157 trabajos presentados serán analizados por un Banco de Evaluadores conformado por profesores (ordinarios e interinos), auxiliares diplomados (ordinarios e interinos), autoridades y graduados empadronados. En base a los criterios aportados por los evaluadores, la Comisión de Extensión de las Actividades Universitarias elevará al Consejo Superior el dictamen definitivo con los proyectos que serán acreditados y los que accederán al subsidio.
A partir del incremento de la partida presupuestaria para subsidios, se prevé que este año aumentará no sólo la cantidad de proyectos que obtendrán financiamiento, sino que además se registrará un incremento en los montos destinados a cada proyecto.
A partir de la primera gestión del Presidente Gustavo Azpiazu, la UNLP comenzó a debatir la necesidad de otorgar a la Extensión Universitaria una jerarquización equivalente a la docencia y a la investigación, como una de los tres pilares sobre los que se asienta la actividad Universitaria. Por ejemplo, en 2005 se habilitó la posibilidad de que los proyectos sean dirigidos y coordinados por profesores titulares, asociados, adjuntos (ordinarios o interinos) y auxiliares docentes (ordinarios e interinos) rentados que acrediten experiencia en extensión. Hasta ese momento, sólo podían cumplir ese rol los profesores adjuntos y titulares, un requisito formal que dejaba afuera a profesionales con destacada trayectoria académica y experiencia en el campo de la extensión.
El impulso al desarrollo de la extensión universitaria se vio también reflejado en el progresivo aumento de las partidas presupuestarias destinadas a subsidiar los proyectos: en 2003 se asignaron 250 mil pesos; en 2004 fueron 350 mil; en 2005, 450 mil; y en 2006 se destinaron 470 mil pesos. Ahora, el proyecto de presupuesto que será sometido a votación en la próxima reunión del Consejo Superior prevé una partida de 650 mil pesos, es decir, un incremento del 38% con respecto al año pasado.
El presidente de la Universidad, Gustavo Azpiazu, explicó que “la promoción de las actividades de extensión es uno de los ejes prioritarios de esta gestión, y de hecho esta temática tiene un rol protagónico en los actuales debates sobre la reforma de nuestro Estatuto, e incluso en las discusiones que a nivel nacional se plantean en torno a la reforma de la Ley de Educación Superior”. En este sentido agregó que “las tareas de extensión son una herramienta fundamental para el fortalecimiento de la relación entre las universidades y la sociedad”.
Ahora, los 157 trabajos presentados serán analizados por un Banco de Evaluadores conformado por profesores (ordinarios e interinos), auxiliares diplomados (ordinarios e interinos), autoridades y graduados empadronados. En base a los criterios aportados por los evaluadores, la Comisión de Extensión de las Actividades Universitarias elevará al Consejo Superior el dictamen definitivo con los proyectos que serán acreditados y los que accederán al subsidio.
A partir del incremento de la partida presupuestaria para subsidios, se prevé que este año aumentará no sólo la cantidad de proyectos que obtendrán financiamiento, sino que además se registrará un incremento en los montos destinados a cada proyecto.
Al respecto, Azpiazu afirmó “la necesidad de acompañar la labor de nuestros extensionistas con una inversión fuerte por parte de la Universidad, porque los proyectos de Extensión son un instrumento de planificación a través del cual se generan procesos de educación no formal, donde las Unidades Académicas a través de los conocimientos acumulados y la capacidad de sus docentes, investigadores, alumnos y no docentes comparten con la comunidad a la cual van dirigidos, los esfuerzos de transformación social y cultural, divulgación científica, desarrollo tecnológico, desarrollo comunitario que permita a la sociedad mejorar su calidad de vida”. (PUNTO CERO).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario