(La Política On Line). El plan de obras del Ministerio de Desarrollo Urbano incluiría 16 pasos, de los cuales 11 se harían sobre las vías de los ferrocarriles Urquiza y Mitre. Ahora, por los atrasos en la licitación de la Línea H de Subtes se utilizaría parte del crédito obtenido a través del Bono Tango para que AUSA construya los pasos. El cambio de destino de los fondos del crédito deben aprobarse en la Legislatura donde ya se negocia, además, la construcción de calles para incrementar la conectividad de las autopistas.
Mala palabra. La construcción de los pasos a nivel en la Ciudad se convirtió para el Ejecutivo porteño en un tema que con apenas mencionarlo desata el mal humor. Es que desde 2008 tiene trabados, por falta de fondos, la finalización de cinco pasos a nivel, a los que ahora se suman otros 11. El alivio llegaría, paradójicamente, del atraso en la concreción de las obras de la Línea H de subtes, obras para la que se tomó una deuda de 300 millones de dólares y de los cuales se ejecutarían en 2010 solo 150. La otra mitad sería la que Subterráneos Buenos Aires (Sbase) prestaría a Autopistas Urbanas Sociedad Anónima (AUSA) para la construcción de los pasos. Todo dependerá de la Legislatura.
En 2010 los diputados porteños autorizaron al Gobierno de Mauricio Macri a tomar deuda pública por 500 millones de dólares. Ese préstamo tenía un destino específico: 200 millones irían para el Fondo de Infraestructura Social (FOISO) y 300 para la construcción de la Línea H y nuevas estaciones en las Líneas A y B de Subtes. Desde que llegó el dinero en abril hasta que termine julio, Sbase utilizaría unos 65 millones de dólares de los 300 y alcanzaría a ejecutar un total de 150 de acuerdo a las obras ya licitadas.
Por tanto, quedarían otros 150 millones que deberían utilizarse para las obras que aún no se licitaron: construcción de los tramos Norte (de estación Corrientes a Plaza Francia) y Sur (de estación Parque Patricios a Pompeya) de la Línea H. Aunque estas obras debían haberse licitado en diciembre de 2009, por diferencias en la forma de hacer el llamado (ver notas relacionadas) entre el ministro de Desarrollo Urbano, Daniel Chain, y el presidente de Sbase, Juan Pablo Piccardo, aún ni se aprobaron los pliegos. Serían esos 150 millones los que el Ejecutivo buscaría destinar a la construcción de los pasos a nivel.
Aunque desde la Cartera de Chain insistieron en que la semana próxima se aprobarían los pliegos de la famosa licitación y que en 2010 se ejecutarían los 300 millones para este destino, LPO comprobó que aún aprobándose los pliegos en la fecha indicada por desarrollo Urbano, la adjudicación de las obras no podría concretarse antes de fin de año y por lo tanto las obras se iniciarían recién en 2011.
Con este margen de tiempo es que juega el macrismo para destinar el dinero a AUSA y que esta construya los pasos. Como los 150 millones de dólares provienen de un crédito por el que se paga un interés del 12,5% anual, Sbase le facilitaría los fondos a AUSA, pero lo haría como un préstamo. Es decir que una empresa del Estados (Sbase) le prestaría a la otra empresa de la Ciudad (AUSA) 150 millones de dólares a una tasa de interes similar a la que el Gobierno debe pagar por el crédito.
Para que toda esta ingeniería se lleve a cabo, la Legislatura porteña debe aprobar el cambio de destino de parte de los fondos obtenidos por la Ciudad a través del endeudamiento externo. Los Diputados oficialistas negociarían ahora con la oposición aprobar este cambio y sumar a la construcción de los pasos a nivel, el de calles transversales que permitan incrementar la conectividad de las autopistas.
Entre la oposición habría predisposición para acompañar la iniciativa, en lo que a los pasos se refiere, pero pondrían dos condiciones sustanciales. Por una parte exigirían imponer sobre AUSA una comisión auditora que controle las contrataciones que realiza la empresa estatal y por otro exigiría la creación de un fondo permanente para Subtes formado con un porcentaje fijo de lo que se recauda en concepto de peajes en la Ciudad.
Por ahora son todas intenciones. Oficialistas y opositores deberán negociar posiciones en la Legislatura y hacía el interior del Pro, definir en que medida responden a los intereses del Ejecutivo. Es que la construcción de los pasos a nivel sería una obra que correspondería al Ministerio de Desarrollo Urbano, mientras que el pavimento quedaría bajo la orbita de la cartera de Espacio y Ambiente Público a cargo de Diego Santilli.
M.E.D.
Mala palabra. La construcción de los pasos a nivel en la Ciudad se convirtió para el Ejecutivo porteño en un tema que con apenas mencionarlo desata el mal humor. Es que desde 2008 tiene trabados, por falta de fondos, la finalización de cinco pasos a nivel, a los que ahora se suman otros 11. El alivio llegaría, paradójicamente, del atraso en la concreción de las obras de la Línea H de subtes, obras para la que se tomó una deuda de 300 millones de dólares y de los cuales se ejecutarían en 2010 solo 150. La otra mitad sería la que Subterráneos Buenos Aires (Sbase) prestaría a Autopistas Urbanas Sociedad Anónima (AUSA) para la construcción de los pasos. Todo dependerá de la Legislatura.
En 2010 los diputados porteños autorizaron al Gobierno de Mauricio Macri a tomar deuda pública por 500 millones de dólares. Ese préstamo tenía un destino específico: 200 millones irían para el Fondo de Infraestructura Social (FOISO) y 300 para la construcción de la Línea H y nuevas estaciones en las Líneas A y B de Subtes. Desde que llegó el dinero en abril hasta que termine julio, Sbase utilizaría unos 65 millones de dólares de los 300 y alcanzaría a ejecutar un total de 150 de acuerdo a las obras ya licitadas.
Por tanto, quedarían otros 150 millones que deberían utilizarse para las obras que aún no se licitaron: construcción de los tramos Norte (de estación Corrientes a Plaza Francia) y Sur (de estación Parque Patricios a Pompeya) de la Línea H. Aunque estas obras debían haberse licitado en diciembre de 2009, por diferencias en la forma de hacer el llamado (ver notas relacionadas) entre el ministro de Desarrollo Urbano, Daniel Chain, y el presidente de Sbase, Juan Pablo Piccardo, aún ni se aprobaron los pliegos. Serían esos 150 millones los que el Ejecutivo buscaría destinar a la construcción de los pasos a nivel.
Aunque desde la Cartera de Chain insistieron en que la semana próxima se aprobarían los pliegos de la famosa licitación y que en 2010 se ejecutarían los 300 millones para este destino, LPO comprobó que aún aprobándose los pliegos en la fecha indicada por desarrollo Urbano, la adjudicación de las obras no podría concretarse antes de fin de año y por lo tanto las obras se iniciarían recién en 2011.
Con este margen de tiempo es que juega el macrismo para destinar el dinero a AUSA y que esta construya los pasos. Como los 150 millones de dólares provienen de un crédito por el que se paga un interés del 12,5% anual, Sbase le facilitaría los fondos a AUSA, pero lo haría como un préstamo. Es decir que una empresa del Estados (Sbase) le prestaría a la otra empresa de la Ciudad (AUSA) 150 millones de dólares a una tasa de interes similar a la que el Gobierno debe pagar por el crédito.
Para que toda esta ingeniería se lleve a cabo, la Legislatura porteña debe aprobar el cambio de destino de parte de los fondos obtenidos por la Ciudad a través del endeudamiento externo. Los Diputados oficialistas negociarían ahora con la oposición aprobar este cambio y sumar a la construcción de los pasos a nivel, el de calles transversales que permitan incrementar la conectividad de las autopistas.
Entre la oposición habría predisposición para acompañar la iniciativa, en lo que a los pasos se refiere, pero pondrían dos condiciones sustanciales. Por una parte exigirían imponer sobre AUSA una comisión auditora que controle las contrataciones que realiza la empresa estatal y por otro exigiría la creación de un fondo permanente para Subtes formado con un porcentaje fijo de lo que se recauda en concepto de peajes en la Ciudad.
Por ahora son todas intenciones. Oficialistas y opositores deberán negociar posiciones en la Legislatura y hacía el interior del Pro, definir en que medida responden a los intereses del Ejecutivo. Es que la construcción de los pasos a nivel sería una obra que correspondería al Ministerio de Desarrollo Urbano, mientras que el pavimento quedaría bajo la orbita de la cartera de Espacio y Ambiente Público a cargo de Diego Santilli.
M.E.D.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario