En la madrugada del viernes 23 de abril un incendio destruyó un importante sector de la Casa del Niño María de Nazaret, ONG, situada de la localidad de Villa Ballester.
La ayuda que inmediatamente comenzó a llegar, impresionó a todos. Pero queda el dolor y la preocupación por los niños... en un barrio de marginalidad, violencia, deterioro espiritual, intelectual, físico, anímico..., abandono, familias con madres inexistentes, con padres desconocidos, droga en sus más diversas variables, alcohol, hambre, prostitución, deserción escolar, carencia de educación, delincuencia, enfermedades...
Juan Klobovs, voluntario enla Casa del Niño, escribió una carta el 26 de abril, en la que relata la situación angustiante y solicita ayuda urgente:
El incendio en la Casa del Niño nos entristecio hasta las fibras mas íntimas.
Dolio ver los destrozos,
Dolio ver como las paredes, el techo,. los muebles, las ventanas fueron tapizados en poco minutos de negro, de polvo negro, negro
A pesar de estar cerrada las puertas de las alacenas, de las heladeras, hubo que tirar todo la comida, toda.
Y la casa se lleno de silencio....
Cuando uno ingresa a la Casa, el primero que viene a saludar y a estrechar un fuerte abrazo es el olor, olor a quemado, a humo y el polvo negro sigue sobrevolando el espacio.
Y a pesar de todo, la sonrisa vuelve
A pesar de todo las manos se acercan
Nos conmueve y nos emociona el despartar de la solidaridad, de los papas primero que pusieron manos a la obra para limpiar y seguir limpiando, y seguir.....
Nos conmueve cada llamado: ¿como puedo ayudar?
Hoy la casa necesita reponer elementos y urgente lo que mas necesita es comida.
Recien mañana se comienza a cocinar y los chicos retiraran la vianda, en la Casa no se puede comer.
Dios quiera que pronto, la casa vuelva a recibir a esos locos bajitos.
Y pedimos por ellos.
Ellos se emocionan y agradecen los pequeños gestos
Y hoy pedimos ese gesto
Hoy, la Directora, de la Casa del Niño María de Nazareth, Graciela Klobovs, escribe una carta (transcripta más abajo) en la que describe la recuperación del hogar, y expresa un pedido de ayuda por las necesidades más urgentes de los niños.
Esta Casa alberga durante el día a 93 niños, en una zona muy carenciada del Gran Buenos Aires.
Sabemos que en las zonas más humildes del Conurbano Bonaerense los flagelos expresados arriba denigran la condición de ser humano a niveles impensables. No exageramos diciendo que la situación es en muchos casos desesperante.
Este proyecto está dirigido a darle dignidad, tanto física, como espiritual y mental, a los niños y a sus familias.
Quien desee colaborar con las necesidades más acuciantes de la Casa del Niño María de Nazareth, puede hacerlo accediendo a www.casadelninomaria.org.ar
Para conocer otros aspectos del proyecto, se puede visitar el siguiente blog: "Mi hijo Martín y yo visitamos la Casa del Niño María de Nazareth", en el que a través de 40 fotos y texto explicativo se exponen las actividades y pedagogía del hogar.
He aquí un SOS que no podemos desoír:
Villa Ballester, 22 de junio de 2010
Varios días nos separan de la noche del incendio.
Varios días de nuestro primer SOS.
Varios días de constante agradecimiento
Llamados, mails, presencia, cercanía, donaciones, mano de obra, solidaridad, afecto, cariño, amor, miradas, silencios, abrazos y más, mucho más vivimos en este tiempo.
Hoy queremos contarles y compartirles como se encuentra nuestra querida Casa del Niño y que de ahora en más, es un poco de cada uno de ustedes.
El sector de la cocina ya está en funcionamiento. Luego de haber tirado todos los alimentos, a pesar del dolor, hubo que hacerlo por el monóxido de carbono, comenzó la tarea de limpieza. El techo y las paredes sintieron el rigor y la frescura de la hidrolavadora. Una vez secas y algo mas limpias se rasquetearon y con la colaboración de propios y de muchos solidarios espontáneos se procedió a pintar el lugar. Queda pendiente reponer los azulejos que se desprendieron por el efecto del fuego.
El comedor, donde también estaba el depósito de ropa y librería, que se fueron junto al fuego al igual que las estanterías, los armarios, una heladera, mesas y sillas que ocupaban los chicos en sus comidas, etc. Después de realizar, similar limpieza que en la cocina, hubo que desprender el revoque flojo, se repuso y se procedió a su posterior pintura. Las cerraduras y vidrios fueron cambiados. Aun nos queda cambiar las ventanas que dan al exterior, (hubo que encargarlas a medida por el tamaño de las mismas) y también hay que reponer los azulejos, mesas, sillas, armarios, etc.
Hasta el momento sólo contamos con luz de emergencia. Estamos esperanzados en que de alguna manera podamos realizar la nueva instalación eléctrica. Los niños comenzaron a asistir normalmente a la Casa aunque en varios sectores dependemos de la luz del día, si el día está nublado debemos permanecer en el patio jugando, ya que los días ya van siendo fríos y no podemos dejarlos quietos.
La historia de cada niño nos mueve a continuar, a no bajar los brazos. Cada historia necesita un encuentro personal, una guía familiar, un apoyo profesional… No es fácil vivir en esta sociedad habiendo crecido en un ambiente de violencia, de indignidad, de carencias constantes, de desvalorización, de falta de todo… desde nuestro trabajo podemos realizar este sostenimiento y los cambios en las familias para que encuentren sus hijos otro lugar en la vida. Es posible, sólo necesitamos recursos, nosotros tenemos los brazos y el corazón preparados para ayudar y cada niño y su familia esperan esa caricia en el alma que significa la Casa del niño Maria de Nazaret.
Es por eso que necesitamos de tu ayuda.
Es posible tener una patria diferente: sin violencia, con trabajo, con dignidad para todos, pero para eso necesitamos esta recomposición estructural de cada familia. Los resultados los vemos diariamente pero queremos llegar a Muchos Más.
Queremos seguir siendo puente, ellos también se merecen llegar.
¡Gracias nuevamente y que Dios los bendiga!
Graciela Klobovs.
La ayuda que inmediatamente comenzó a llegar, impresionó a todos. Pero queda el dolor y la preocupación por los niños... en un barrio de marginalidad, violencia, deterioro espiritual, intelectual, físico, anímico..., abandono, familias con madres inexistentes, con padres desconocidos, droga en sus más diversas variables, alcohol, hambre, prostitución, deserción escolar, carencia de educación, delincuencia, enfermedades...
Juan Klobovs, voluntario enla Casa del Niño, escribió una carta el 26 de abril, en la que relata la situación angustiante y solicita ayuda urgente:
El incendio en la Casa del Niño nos entristecio hasta las fibras mas íntimas.
Dolio ver los destrozos,
Dolio ver como las paredes, el techo,. los muebles, las ventanas fueron tapizados en poco minutos de negro, de polvo negro, negro
A pesar de estar cerrada las puertas de las alacenas, de las heladeras, hubo que tirar todo la comida, toda.
Y la casa se lleno de silencio....
Cuando uno ingresa a la Casa, el primero que viene a saludar y a estrechar un fuerte abrazo es el olor, olor a quemado, a humo y el polvo negro sigue sobrevolando el espacio.
Y a pesar de todo, la sonrisa vuelve
A pesar de todo las manos se acercan
Nos conmueve y nos emociona el despartar de la solidaridad, de los papas primero que pusieron manos a la obra para limpiar y seguir limpiando, y seguir.....
Nos conmueve cada llamado: ¿como puedo ayudar?
Hoy la casa necesita reponer elementos y urgente lo que mas necesita es comida.
Recien mañana se comienza a cocinar y los chicos retiraran la vianda, en la Casa no se puede comer.
Dios quiera que pronto, la casa vuelva a recibir a esos locos bajitos.
Y pedimos por ellos.
Ellos se emocionan y agradecen los pequeños gestos
Y hoy pedimos ese gesto
Hoy, la Directora, de la Casa del Niño María de Nazareth, Graciela Klobovs, escribe una carta (transcripta más abajo) en la que describe la recuperación del hogar, y expresa un pedido de ayuda por las necesidades más urgentes de los niños.
Esta Casa alberga durante el día a 93 niños, en una zona muy carenciada del Gran Buenos Aires.
Sabemos que en las zonas más humildes del Conurbano Bonaerense los flagelos expresados arriba denigran la condición de ser humano a niveles impensables. No exageramos diciendo que la situación es en muchos casos desesperante.
Este proyecto está dirigido a darle dignidad, tanto física, como espiritual y mental, a los niños y a sus familias.
Quien desee colaborar con las necesidades más acuciantes de la Casa del Niño María de Nazareth, puede hacerlo accediendo a www.casadelninomaria.org.ar
Para conocer otros aspectos del proyecto, se puede visitar el siguiente blog: "Mi hijo Martín y yo visitamos la Casa del Niño María de Nazareth", en el que a través de 40 fotos y texto explicativo se exponen las actividades y pedagogía del hogar.
He aquí un SOS que no podemos desoír:
Villa Ballester, 22 de junio de 2010
Varios días nos separan de la noche del incendio.
Varios días de nuestro primer SOS.
Varios días de constante agradecimiento
Llamados, mails, presencia, cercanía, donaciones, mano de obra, solidaridad, afecto, cariño, amor, miradas, silencios, abrazos y más, mucho más vivimos en este tiempo.
Hoy queremos contarles y compartirles como se encuentra nuestra querida Casa del Niño y que de ahora en más, es un poco de cada uno de ustedes.
El sector de la cocina ya está en funcionamiento. Luego de haber tirado todos los alimentos, a pesar del dolor, hubo que hacerlo por el monóxido de carbono, comenzó la tarea de limpieza. El techo y las paredes sintieron el rigor y la frescura de la hidrolavadora. Una vez secas y algo mas limpias se rasquetearon y con la colaboración de propios y de muchos solidarios espontáneos se procedió a pintar el lugar. Queda pendiente reponer los azulejos que se desprendieron por el efecto del fuego.
El comedor, donde también estaba el depósito de ropa y librería, que se fueron junto al fuego al igual que las estanterías, los armarios, una heladera, mesas y sillas que ocupaban los chicos en sus comidas, etc. Después de realizar, similar limpieza que en la cocina, hubo que desprender el revoque flojo, se repuso y se procedió a su posterior pintura. Las cerraduras y vidrios fueron cambiados. Aun nos queda cambiar las ventanas que dan al exterior, (hubo que encargarlas a medida por el tamaño de las mismas) y también hay que reponer los azulejos, mesas, sillas, armarios, etc.
Hasta el momento sólo contamos con luz de emergencia. Estamos esperanzados en que de alguna manera podamos realizar la nueva instalación eléctrica. Los niños comenzaron a asistir normalmente a la Casa aunque en varios sectores dependemos de la luz del día, si el día está nublado debemos permanecer en el patio jugando, ya que los días ya van siendo fríos y no podemos dejarlos quietos.
La historia de cada niño nos mueve a continuar, a no bajar los brazos. Cada historia necesita un encuentro personal, una guía familiar, un apoyo profesional… No es fácil vivir en esta sociedad habiendo crecido en un ambiente de violencia, de indignidad, de carencias constantes, de desvalorización, de falta de todo… desde nuestro trabajo podemos realizar este sostenimiento y los cambios en las familias para que encuentren sus hijos otro lugar en la vida. Es posible, sólo necesitamos recursos, nosotros tenemos los brazos y el corazón preparados para ayudar y cada niño y su familia esperan esa caricia en el alma que significa la Casa del niño Maria de Nazaret.
Es por eso que necesitamos de tu ayuda.
Es posible tener una patria diferente: sin violencia, con trabajo, con dignidad para todos, pero para eso necesitamos esta recomposición estructural de cada familia. Los resultados los vemos diariamente pero queremos llegar a Muchos Más.
Queremos seguir siendo puente, ellos también se merecen llegar.
¡Gracias nuevamente y que Dios los bendiga!
Graciela Klobovs.
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