(La Política OnLine). El intendente de Tres de Febrero sería reticente a recibir funcionarios K en el distrito que gobierna hace casi 20 años, por lo que el santacrceño estaría pergeñando una estrategia que podría desembocar en el apoyo a una lista diferente en las elecciones de 2011. De esta manera Curto, que ganó por poco el año pasado, vería muy complicada su nueva reelección.Néstor Kirchner junto al intendente de Tres de Febrero, Hugo CurtoVer más imágenes»
La venganza es un plato que se sirve frío, dice el refrán. Y eso Néstor Kirchner lo sabe a la perfección. Lejos de perdonar o dejar al olvido la estrategia de los intendentes del Conurbano bonaerense que le costó su primera derrota electoral el año pasado, el santacruceño no tiene paz y está fabricando silenciosamente un plan para que no le vuelva a pasar lo mismo.
La Política Online anticipó que en Ituzaingó, Kirchner fogonea a dos candidatos como método de presión sobre el intendente Alberto Descalzo, uno de los que jugó a dos puntas con el peronismo disidente en junio del año pasado.
Ahora, el señalado por la ira santacruceña sería el mandamás de Tres de Febrero, Hugo Curto, quien como pudo saber La Política Online, no deja entrar a su gestión a nadie que no sea digitado por él mismo, por más que las sugerencias provengan desde Olivos.
Es por es que en el kirchnerismo ya se están anticipando a una nueva “traición” y podrían jugar fuerte para destronar a Curto de la intendencia que conserva hace casi veinte años.
Kirchner intentaría explotar el escenario que se planteó en esta localidad de la Primera Sección electoral el año pasado, cuando la lista de Curto ganó a nivel municipal, pero las listas divididas del Acuerdo Cívico sorprendieron a todos con su buena performance.
Entonces, si Curto sigue en su postura impermeable, sin recibir a los enviados del kirchnerismo, el ex presidente podría apoyar a otra lista y de esta manera restarle una buena parte de los votantes al intendente, lo que le acomplejaría en gran medida su reelección.
La venganza es un plato que se sirve frío, dice el refrán. Y eso Néstor Kirchner lo sabe a la perfección. Lejos de perdonar o dejar al olvido la estrategia de los intendentes del Conurbano bonaerense que le costó su primera derrota electoral el año pasado, el santacruceño no tiene paz y está fabricando silenciosamente un plan para que no le vuelva a pasar lo mismo.
La Política Online anticipó que en Ituzaingó, Kirchner fogonea a dos candidatos como método de presión sobre el intendente Alberto Descalzo, uno de los que jugó a dos puntas con el peronismo disidente en junio del año pasado.
Ahora, el señalado por la ira santacruceña sería el mandamás de Tres de Febrero, Hugo Curto, quien como pudo saber La Política Online, no deja entrar a su gestión a nadie que no sea digitado por él mismo, por más que las sugerencias provengan desde Olivos.
Es por es que en el kirchnerismo ya se están anticipando a una nueva “traición” y podrían jugar fuerte para destronar a Curto de la intendencia que conserva hace casi veinte años.
Kirchner intentaría explotar el escenario que se planteó en esta localidad de la Primera Sección electoral el año pasado, cuando la lista de Curto ganó a nivel municipal, pero las listas divididas del Acuerdo Cívico sorprendieron a todos con su buena performance.
Entonces, si Curto sigue en su postura impermeable, sin recibir a los enviados del kirchnerismo, el ex presidente podría apoyar a otra lista y de esta manera restarle una buena parte de los votantes al intendente, lo que le acomplejaría en gran medida su reelección.
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