El barrio Don Alfonso fue el elegido para la primera edición de este concurso, que procura sumar a los vecinos al cuidado de su entorno. Participaron 14 cuadras y el jurado tuvo una difícil tarea para determinar a los dos premiados. El concurso se replicará próximamente en otros barrios de San Miguel.
Una explosión de alegría se escuchó en la cuarta fila del público asistente cuando el jurado anunció al ganador del premio mayor. Los vecinos de la calle Bussolini, entre Salerno y Florencio Sánchez, saltaron de sus sillas, gritaron y se abrazaron, al ver coronado el esfuerzo que habían hecho durante las últimas semanas. Ellos fueron los ganadores del primer concurso “Mejorá tu cuadra, mejoremos San Miguel”, organizado por la Municipalidad, que tuvo como escenario al barrio Don Alfonso.
Durante dos semanas, los vecinos de las 14 cuadras que se inscribieron trabajaron duro para mejorar y embellecer sus calles, con el incentivo de los dos premios establecidos: uno de 5000 y otro de 20.000 pesos.
En el acto de premiación, el Subsecretario de Gestión de Gobierno y responsable del concurso, Jaime Méndez, aseguró: “Más allá de los resultados, estamos muy contentos con este primer concurso. No era fácil venir a un barrio y proponerles a los vecinos que mejoraran su cuadra, eso podía conducir a reclamos diversos. Pero con la confianza que nos da el trabajo que venimos haciendo, nos animamos y tuvimos una respuesta excelente de parte de todos. Ya en las reuniones previas a la entrega de premios comprobamos que esta era una gran idea, porque hubo gente que nos dijo que hacía 20 años que no se hablaba con algún vecino y que a raíz de este concurso no sólo se volvieron a hablar, sino que terminaron trabajando juntos. Eso solo ya es para nosotros muy satisfactorio”.
Enseguida, el Intendente, Joaquín de la Torre, agregó: “Esta entrega de premios es en realidad la frutilla de la torta, porque a nosotros lo que más nos interesa es poder restablecer relaciones entre la comunidad, tanto entre el Estado y los vecinos como entre los vecinos mismos. Esto tiene que ver con la idea de que los problemas los solucionamos entre todos, y cada uno tiene que aportar su granito de arena, más allá de que nosotros como responsables del gobierno tenemos que poner piedras de arena, pero también necesitamos de los granitos. Hoy muchas veces sabemos lo que pasa en Japón o en Finlandia, pero no sabemos qué le pasa a la persona que vive al lado nuestro, qué necesidades tiene y en qué la podemos ayudar. Tenemos que recrear la idea de comunidad”.
Luego, como premio para todos los participantes, se le entregó a cada uno un juego de pala, rastrillo, tijera y guantes, además de una bordeadora por cuadra, para seguir fomentando el trabajo vecinal.
La hora de los premios
El jurado estuvo integrado por el concejal de la Coalición Cívica Alberto Novo, el periodista Sebastián Dumont y la arquitecta Estela Canellas, profesora de la cátedra de Urbanismo de la Universidad Nacional de General Sarmiento.
Esta última afirmó que tuvieron en cuenta diferentes cosas a la hora de evaluar, como veredas, zanjas, forestación, cercos, fachadas y disposición de la basura. Y destacó: “Este concurso evidencia la importancia de tener una visión compartida entre las autoridades y los vecinos, consideramos a esta iniciativa como un paso adelante hacia un debate democrático del futuro de San Miguel”.
Alberto Novo, en tanto, dijo: “La convocatoria del jurado habla muy bien del Intendente para crear un espacio democrático y de participación, ya que hay un representante del periodismo local, una representante del ámbito académico universitario y yo que represento a la oposición política de San Miguel. Esto le da transparencia a la evaluación que hemos hecho, y es para destacar, ya que habitualmente las gestiones utilizan este tipo de eventos para llevar agua para su molino; en este caso no fue así y es una decisión política del Intendente De la Torre que me parece importante destacar”.
Por último, Dumont afirmó: “Muchas veces corremos detrás de lo urgente y nos olvidamos de lo importante. No es habitual encontrar que el Estado se ponga a trabajar en conjunto con la comunidad, y que además les dé a los vecinos la posibilidad de encarar las modificaciones o arreglos que creen necesarios”.
Antes de anunciar a los ganadores, los integrantes de l jurado resaltaron lo trabajoso que fue para ellos llegar a un veredicto, porque “se ha visto un trabajo muy bueno en la mayoría de las cuadras. Tomamos dos hechos significativos como parámetros: el embellecimiento y el mejoramiento, que en algunos casos está ligado con la solidaridad y la accesibilidad para personas con capacidades diferentes”.
Finalmente, el segundo puesto fue para los vecinos de la calle Pichincha entre Arricau y Callao, mientras que el primero fue para los que viven en Bussolini entre Salerno y Florencio Sánchez.
Antonio, un vecino de la cuadra ganadora, dijo emocionado que “trabajamos durante dos semanas todos los días, limpiando, pintando, plantando árboles… nos pusimos de acuerdo, planificamos recursos, vimos qué podía aportar cada vecino… el último día nos levantamos todos a las seis de la mañana. La experiencia fue muy buena, muy positiva. El Estado hizo que los vecinos saliéramos a la calle a trabajar y participar”.
Días después, los habitantes de las dos cuadras triunfantes fueron a hacer efectivo su premio al Palacio Municipal, donde fueron recibidos y felicitados una vez más por el Jefe Comunal.
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