(El Sol). Los vecinos de la zona oeste del distrito siguen manifestando su disconformidad con el trabajo que presta la recolectora de residuos Covelia.
La firma se hizo cargo de la recolección de los desperdicios desde Avenida La Plata hasta San Francisco Solano, tomando así la responsabilidad de prestar servicio en los barrios más humildes de la ciudad en el oeste de Ezpeleta y Bernal, además de la zona comprendida por San Francisco Solano y La Florida.
Este servicio era anteriormente prestado por TUQSA, histórica empresa local a la que le quitaron la conceción en la gestión Villordo, quien sumaba cientos de reclamos de los vecinos.
Cuando se contrató a la firma, ya se había dividido en dos a la ciudad para brindar un servicio más efectivo, pero las quejas de aquellos que tienen que lidiar con la concesionaria de la recolección a diario no han notado muchas mejoras en la prestación del servicio.
Los reclamos en las voces vecinales se repiten y hablan de que la empresa no transita por ciertas zonas, que cuando llueve no ingresa a algunas calles de tierra y que a veces se olvidan de pasar por varios días, entre otros.
Desde diferentes puntos de la zona donde Covelia está a cargo de las tareas se amontonan los reclamos y mientras pasa el tiempo siguen sin solucionarse.
En los últimos días, los vecinos de la zona de los barrios La Paz, El Tala, Dreymar y otros aledaños a la cuenca del arroyo San Francisco se reunieron en el CIC para manifestar su disconformidad con el servicio prestado y uno de los principales puntos en los que circuló el cónclave vecinal fue en el amontonamiento de basura en las esquinas, conocido popularmente como achique y la falta de recolección que se evidencia durante los días de lluvia, cuando los camiones muchas veces dejan de pasar, dijeron.
Reclamos varios
Covelia tiene la concesión de la recolección en varios distritos del Conurbano (Lomas, Lanús, Escobar, Esteban Echeverría, Merlo, San Miguel, San Martín y Tres de Febrero) además del interior provincial (Pinamar, Bahía Blanca) y en la gran mayoría los vecinos se muestran inconformes con el servicio.
En los foros de Internet se puede ver cómo se reflejan críticas de vecinos de Lomas en el caso Santa Catalina, de Pinamar por el servicio prestado, en Bahía Blanca por los cánones que percibe, entre otros.
Es una de las empresas más cuestionadas del conurbano. La firma inició su tarea en 1999 en San Miguel y desde allí empezó a ganar la mayor parte de las licitaciones de la basura, convirtiéndose en una de las más importantes del rubro.
Sobre 17 municipios del conurbano presta servicio en 9 y recibe altos cánones por los trabajos realizados y ya ha tenido encontronazos con intendentes como Fernando Gray en Esteban Echeverría y el propio Francisco Gutiérrez en la ciudad, cuando se habló de municipalizar el servicio, pero en ambos casos la firma sigue trabajando en las comunas.
La firma se hizo cargo de la recolección de los desperdicios desde Avenida La Plata hasta San Francisco Solano, tomando así la responsabilidad de prestar servicio en los barrios más humildes de la ciudad en el oeste de Ezpeleta y Bernal, además de la zona comprendida por San Francisco Solano y La Florida.
Este servicio era anteriormente prestado por TUQSA, histórica empresa local a la que le quitaron la conceción en la gestión Villordo, quien sumaba cientos de reclamos de los vecinos.
Cuando se contrató a la firma, ya se había dividido en dos a la ciudad para brindar un servicio más efectivo, pero las quejas de aquellos que tienen que lidiar con la concesionaria de la recolección a diario no han notado muchas mejoras en la prestación del servicio.
Los reclamos en las voces vecinales se repiten y hablan de que la empresa no transita por ciertas zonas, que cuando llueve no ingresa a algunas calles de tierra y que a veces se olvidan de pasar por varios días, entre otros.
Desde diferentes puntos de la zona donde Covelia está a cargo de las tareas se amontonan los reclamos y mientras pasa el tiempo siguen sin solucionarse.
En los últimos días, los vecinos de la zona de los barrios La Paz, El Tala, Dreymar y otros aledaños a la cuenca del arroyo San Francisco se reunieron en el CIC para manifestar su disconformidad con el servicio prestado y uno de los principales puntos en los que circuló el cónclave vecinal fue en el amontonamiento de basura en las esquinas, conocido popularmente como achique y la falta de recolección que se evidencia durante los días de lluvia, cuando los camiones muchas veces dejan de pasar, dijeron.
Reclamos varios
Covelia tiene la concesión de la recolección en varios distritos del Conurbano (Lomas, Lanús, Escobar, Esteban Echeverría, Merlo, San Miguel, San Martín y Tres de Febrero) además del interior provincial (Pinamar, Bahía Blanca) y en la gran mayoría los vecinos se muestran inconformes con el servicio.
En los foros de Internet se puede ver cómo se reflejan críticas de vecinos de Lomas en el caso Santa Catalina, de Pinamar por el servicio prestado, en Bahía Blanca por los cánones que percibe, entre otros.
Es una de las empresas más cuestionadas del conurbano. La firma inició su tarea en 1999 en San Miguel y desde allí empezó a ganar la mayor parte de las licitaciones de la basura, convirtiéndose en una de las más importantes del rubro.
Sobre 17 municipios del conurbano presta servicio en 9 y recibe altos cánones por los trabajos realizados y ya ha tenido encontronazos con intendentes como Fernando Gray en Esteban Echeverría y el propio Francisco Gutiérrez en la ciudad, cuando se habló de municipalizar el servicio, pero en ambos casos la firma sigue trabajando en las comunas.
Los gastos
Las inversiones en recolección en el distrito son más que significativas. En 2009 se invirtieron 42 millones de pesos aproximadamente de los cuales 21 fueron para CLIBA, 19 para Covelia y el resto para la CEAMSE.
En 2010 esta suma se siguió acrecentando y el presupuesto destinará algo así como 48 millones a dividir entre las dos empresas y el programa de reciclaje que maneja la Comuna en Don Bosco y Quilmes Centro.
Los cánones que invierte la ciudad en recolección son de los más altos del conurbano, sólo superado por La Matanza (donde hay 300 kilómetros cuadrados y la empresa Martin & Martin factura 90 millones de pesos); Morón (59 millones para Urbaser en 186 kilómetros); San Martín (en 56 kilómetros se invierten 54 millones a favor de Covelia); Ituzaingó y Vicente López (52 millones para 38 y 33 kilómetros, a favor de Urbanhica y Transportes Olivos).
Luego vienen Quilmes y Lomas (ambos 48 millones a favor de CLIBA y Covelia, el primero en una superficie de 125 kilómetros y Covelia -Eco Lomas en la segunda sobre 89 kilómetros). Otras empresas como El Trébol perciben 23 millones en Malvinas Argentinas y Transur 20 en Pilar.
En Florencio Varela lo realiza una UTE denominada Di Cola y en 190 kilómetros se abona anualmente cerca de 20 millones; mientras que en Avellaneda Preactiva ya cobra 33 millones aproximadamente.
Los más económicos son municipales. En Berazategui la Comuna invierte 10 millones y medio en 217 kilómetros y en José C. Paz una suma muy similar por 50.
Las inversiones en recolección en el distrito son más que significativas. En 2009 se invirtieron 42 millones de pesos aproximadamente de los cuales 21 fueron para CLIBA, 19 para Covelia y el resto para la CEAMSE.
En 2010 esta suma se siguió acrecentando y el presupuesto destinará algo así como 48 millones a dividir entre las dos empresas y el programa de reciclaje que maneja la Comuna en Don Bosco y Quilmes Centro.
Los cánones que invierte la ciudad en recolección son de los más altos del conurbano, sólo superado por La Matanza (donde hay 300 kilómetros cuadrados y la empresa Martin & Martin factura 90 millones de pesos); Morón (59 millones para Urbaser en 186 kilómetros); San Martín (en 56 kilómetros se invierten 54 millones a favor de Covelia); Ituzaingó y Vicente López (52 millones para 38 y 33 kilómetros, a favor de Urbanhica y Transportes Olivos).
Luego vienen Quilmes y Lomas (ambos 48 millones a favor de CLIBA y Covelia, el primero en una superficie de 125 kilómetros y Covelia -Eco Lomas en la segunda sobre 89 kilómetros). Otras empresas como El Trébol perciben 23 millones en Malvinas Argentinas y Transur 20 en Pilar.
En Florencio Varela lo realiza una UTE denominada Di Cola y en 190 kilómetros se abona anualmente cerca de 20 millones; mientras que en Avellaneda Preactiva ya cobra 33 millones aproximadamente.
Los más económicos son municipales. En Berazategui la Comuna invierte 10 millones y medio en 217 kilómetros y en José C. Paz una suma muy similar por 50.
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