El líder de Proyecto Sur y diputado nacional electo advirtió que el kirchnerismo no tiene sesgo progresista. Lejos de Julio Cobos y cerca del santafesino Binner.El líder de Proyecto Sur y diputado nacional electo, Fernando "Pino" Solanas, cuestionó la política del gobierno de Cristina y Néstor Kirchner, advirtió que no tienen un sesgo progresista y los acusó de jugar a favor de las empresas "amigas del poder".
Solanas advirtió que el kirchnerismo, lejos de plantear políticas progresistas, está sosteniendo "las rémoras del modelo neoliberal, que sigue vigente", y consideró evidente que cuando la administración K se plantea que está gobernando hacia el centroizquierda "está tocando guitarras desafinadas".
"Pino" puso como ejemplo que las decisiones adoptadas por la administración central están vinculadas con la "asociación de las grandes corporaciones empresarias, petroleras, mineras y agorexportadoras", y sostuvo que esas características no se corresponden con "un Gobierno progresista".
"Este Gobierno beneficia a las empresas amigas del poder, es el socio en el territorio de las multinacionales y de las grandes corporaciones extranjeras a quienes favorece con desgravaciones", planteó Solanas en una entrevista con Asteriscos TV, por Canal Metro.
Pino Solanas mencionó que otro punto importante que podría marcar un perfil progresista es la recuperación de la infraestructura y marcó que, en cambio, "ni reactivó la red ferroviaria, ni construyó un solo barco para el país, a pesar de que tiene astilleros", y colocó a sectores de la oposición como integrantes del "mismo club".
Por ejemplo, mencionó que el radicalismo, la Coalición Cívica de Elisa Carrió y el PRO de Mauricio Macri "a quien, tanto coloca como enemigo", en realidad "no tienen diferencias" y también sumó en ese paquete a Eduardo Duhalde y a Francisco De Narváez.
A todos ellos los incluyó dentro de lo que denominó "expresiones de la derecha criolla, algunas más modernas que otras", rechazó la posibilidad de un acercamiento con Julio Cobos y en cambio mencionó como posible aliado al gobernador de Santa Fe, Hermes Binner.
"Cobos fue socio de Cristina Kirchner hace muy poco, en 2007, y todavía es su vicepresidente, además de haberse subido al festín de las privatizaciones y haber dado una prórroga a las concesiones petroleras por 30 años. Le salió mal el negocio con Cobos a los Kirchner", ironizó Pino sobre el vínculo entre el ex gobernador radical, que bloqueó la resolución de retenciones móviles, y el matrimonio gobernante.
Remarcó, en cambio, que con Hermes Binner tiene "coincidencias" y destacó que la decisión de su Proyecto Sur es "prepararse para gobernar la Argentina, con los ejes de "recuperar la soberanía de los recursos, la democratización, y la consideración de que tocar los bienes públicos es infamante".
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