LA DECISIÓN SE HABRÍA APURADO AL COMPROBARSE QUE ES LA SEGUNDA CARRETERA MÁS PELIGROSA DEL PAÍS, PERO LAS MEJORAS LLEGARÍAN SÓLO HASTA CHACABUCO.
La Ruta Nacional Nº 7, carretera por la que deben transitar en forma cotidiana los habitantes del distrito de Leandro N. Alem y de una vasta región, finalmente sería ensanchada hasta Chacabuco, para minimizar los enormes riesgos que genera el intenso tránsito.
De acuerdo con la información obtenida, se supo que la empresa constructora Cartellone, concesionaria vial de esta ruta, daría comienzo a mediados del próximo mes a la obra de ensanche de la cinta asfáltica en el tramo comprendido entre San Andrés de Giles y Chacabuco, pero dejaría de lado el tramo hasta Junín.
El ensanche de la ruta 7, según señalaron las fuentes consultadas, forma parte de las obras a realizar que figuraban en los pliegos de concesión de dicha vía de comunicación, pero cuyo trámite se habría apurado a raíz de los reiterados accidentes fatales, que la transforman en la segunda ruta nacional más peligrosa del país.
Asimismo, otro emprendimiento proyectado, y aparentemente próximo a iniciarse, sería la construcción de una autovía con carriles de circulación separados entre Luján y San Andrés de Giles, continuando la obra que nace en el Acceso Oeste.
A partir de la ciudad de Giles, el ensanche de la ruta sería de un metro y medio por mano de circulación, lo cual también incluirá el acondicionamiento de nuevas banquinas, obra que se haría hasta el kilómetro 200 de la ruta, postergando un viejo reclamo de Junín.
La empresa Cartellone se encuentra desde comienzos de año, junto a otra compañía, a cargo de la concesión de la ruta 7, y esa firma tiene su sede central en Mendoza y oficinas en distintos puntos del país y de naciones de Latinoamérica.
La realización de estas obras dejaría para una etapa posterior el proyecto para que el tramo Luján-Junín sea una autovía en toda su extensión.-
(Fuente: La Nueva Voz).
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