El ministro de Economía bonaerense disparó contra Santiago Montoya a quien vinculó con una nota que lo ubicaba fuera del gabinete “Manosean mi nombre y promocionan a Montoya. Me canse. Yo laburo, otros están muy al pedo”, escribió en Twitter.
Las pujas en el gabinete de Daniel Scioli quedaron expuestas hoy cuando el ministro de Economía, Alejandro Arlía, salió a cruzar al titular del Grupo Bapro, Santiago Montoya, a quien responsabilizó por un artículo del diario El Día de La Plata que mencionaba al ex ministro Gerardo Otero como su reemplazante.
“Manosean mi nombre y promocionan a Montoya. Me canse. Yo laburo, otros están muy al pedo”, escribió Arlía en Twitter por la mañana tras leer ese trascendido en la nota del periodista Mariano Pérez Eulate, que se centraba en detallar las reformas en los ministerios que contempla el Plan de Regionalización y Reforma del Estado provincial que tiene a su cargo el ex recaudador Santiago Montoya.
Lo que irritó a Arlía fue la versión que ubicaba a Otero en su puesto. Se trata de un economista que ya pasó por esa área durante la gestión de Felipe Solá y que fue despedido en su momento por una presión directa de Néstor Kirchner. Según el diario El Día, la movida sería una estrategia del gobernador Scioli para resistir la voracidad kirchnerista que supuestamente intentará ocupar ese ministerio. Lo extraño es que Arlía es uno de los ministros del gabinete de Scioli con mejor relación con el kirchnerismo y solía ser uno de los "protegidos" del ex presidente, quien solía convocarlo a Olivos.
En tal caso, la mención de Otero no es casual. Fue el armador de los equipos técnicos de Jorge Sarghini durante la campaña de 2007, más tarde fue asesor de Alberto Balestrini y por estos días se convirtió en la mano derecha de Santiago Montoya en el armado del Plan de Regionalización.
Lo cierto es que el nombre del ex ministro de Economía puso furioso a Arlía. “Otra vez vuelven a aparecer (Santiago) Montoya y mi amigo Gerardo Otero en el tapete. Gerardo y yo no nos merecemos este manoseo”, se quejó. Ahora “Montoya va a decir ‘yo no fui’”, agregó el ministro en la red social de los 140 caracteres.
Más serenos, en los pasillos del Ministerio de Economía bonaerense la preocupación por la "operación" que sin dudar atribuían a Montoya, se vinculaba con el daño que este tipo de "ruidos políticos" le causan a la gestión que en medio de la crisis financiera global está colocando bonos en el exterior y letes en el mercado local.
Además, el ministro tendría diferencias con la nueva estructura ministerial que propone Montoya a la que considera como productora de más burocracia estatal, porque por ejemplo, propone la creación de cuatro vicejefes de Gabinete.
Paños fríos y los antecedentes del conflicto
Tras la embestida de Arlía sobre Montoya, desde el gobierno bajaron la orden de minimizar el malestar para evitar que se convierta en una crisis de gabinete. Ambos funcionarios recibieron llamados desde cargos superiores. Montoya recibió su reto por la torpeza de su movida y el ministro de Economía fue conminado a frenar su enojo tuitero.
Días atrás, en una entrevista con C5N, Scioli adelantó que este año no habrá testimoniales y que todos aquellos candidatos que son candidatos legislativos asumirán sus bancas en caso de resultar electos.
El mismo gobernador expresó que “habrá una fuerte renovación" en su equipo de gobierno a partir de diciembre si es que consigue la reelección.
La ministra de Infraestructura, Cristina Álvarez Rodríguez, y el titular de Educación, Mario Oporto, ocupan el segundo y tercer escalón, respectivamente, de la nómina de diputados nacionales. Esos dos ministerios quedarán vacantes a partir de diciembre.
Pero además, son candidatos a legisladores provinciales Baldomero “Cacho” Álvarez (Desarrollo Social), Martín Ferré (Producción) y Ariel Franetovich (Asuntos Agrarios). Todos, según Scioli, irán a la Legislatura y otros tres ministerios bonaerenses sufrirán así un cambio de mando en el posible segundo mandato sciolista.
Pero por encima de estos cambios, asoman las profundas modificaciones en la estructura ministerial que propone el Plan de Regionalización de Montoya, que Scioli pidió tener antes de fin de año pero que, debido al difícil cierre de listas, difícilmente será aprobado con la actual conformación de la Legislatura.
En una entrevista con La Política Online, Montoya habló en su momento de lo significarán estos cambios en los ministerios y adelantó que “está en la naturaleza humana resistirse a los cambios”.
El titular del Grupo Bapro dijo que “Habrá quienes se pongan nerviosos o que opongan resistencia. Sin embargo yo no estoy preocupado por los funcionarios, sí me preocupa una cosa poco definida que podríamos llamar como una máquina de impedir o como los intereses de las corporaciones que se instalan alrededor de un poder centralizado”.
Un cargo para Montoya
Como sea, desde el entorno de Montoya negaron a LPO que el funcionario busque encabezar un ministerio, pero admiten que “debe ocupar un lugar donde pueda tener herramientas para llevar a cabo la transformación que Scioli demanda”.
Sin embargo, descartan las versiones que lo ubican en el ministerio de Producción porque, según dicen, “es sólo un sello”.
Respecto a la posible designación de Otero al frente de Economía no la confirman pero tampoco la desmienten. “Otero puede ser ministro de economía pero puede ser otra cosa”, dicen cerca del ex recaudador. (La Política OnLine).
Las pujas en el gabinete de Daniel Scioli quedaron expuestas hoy cuando el ministro de Economía, Alejandro Arlía, salió a cruzar al titular del Grupo Bapro, Santiago Montoya, a quien responsabilizó por un artículo del diario El Día de La Plata que mencionaba al ex ministro Gerardo Otero como su reemplazante.
“Manosean mi nombre y promocionan a Montoya. Me canse. Yo laburo, otros están muy al pedo”, escribió Arlía en Twitter por la mañana tras leer ese trascendido en la nota del periodista Mariano Pérez Eulate, que se centraba en detallar las reformas en los ministerios que contempla el Plan de Regionalización y Reforma del Estado provincial que tiene a su cargo el ex recaudador Santiago Montoya.
Lo que irritó a Arlía fue la versión que ubicaba a Otero en su puesto. Se trata de un economista que ya pasó por esa área durante la gestión de Felipe Solá y que fue despedido en su momento por una presión directa de Néstor Kirchner. Según el diario El Día, la movida sería una estrategia del gobernador Scioli para resistir la voracidad kirchnerista que supuestamente intentará ocupar ese ministerio. Lo extraño es que Arlía es uno de los ministros del gabinete de Scioli con mejor relación con el kirchnerismo y solía ser uno de los "protegidos" del ex presidente, quien solía convocarlo a Olivos.
En tal caso, la mención de Otero no es casual. Fue el armador de los equipos técnicos de Jorge Sarghini durante la campaña de 2007, más tarde fue asesor de Alberto Balestrini y por estos días se convirtió en la mano derecha de Santiago Montoya en el armado del Plan de Regionalización.
Lo cierto es que el nombre del ex ministro de Economía puso furioso a Arlía. “Otra vez vuelven a aparecer (Santiago) Montoya y mi amigo Gerardo Otero en el tapete. Gerardo y yo no nos merecemos este manoseo”, se quejó. Ahora “Montoya va a decir ‘yo no fui’”, agregó el ministro en la red social de los 140 caracteres.
Más serenos, en los pasillos del Ministerio de Economía bonaerense la preocupación por la "operación" que sin dudar atribuían a Montoya, se vinculaba con el daño que este tipo de "ruidos políticos" le causan a la gestión que en medio de la crisis financiera global está colocando bonos en el exterior y letes en el mercado local.
Además, el ministro tendría diferencias con la nueva estructura ministerial que propone Montoya a la que considera como productora de más burocracia estatal, porque por ejemplo, propone la creación de cuatro vicejefes de Gabinete.
Paños fríos y los antecedentes del conflicto
Tras la embestida de Arlía sobre Montoya, desde el gobierno bajaron la orden de minimizar el malestar para evitar que se convierta en una crisis de gabinete. Ambos funcionarios recibieron llamados desde cargos superiores. Montoya recibió su reto por la torpeza de su movida y el ministro de Economía fue conminado a frenar su enojo tuitero.
Días atrás, en una entrevista con C5N, Scioli adelantó que este año no habrá testimoniales y que todos aquellos candidatos que son candidatos legislativos asumirán sus bancas en caso de resultar electos.
El mismo gobernador expresó que “habrá una fuerte renovación" en su equipo de gobierno a partir de diciembre si es que consigue la reelección.
La ministra de Infraestructura, Cristina Álvarez Rodríguez, y el titular de Educación, Mario Oporto, ocupan el segundo y tercer escalón, respectivamente, de la nómina de diputados nacionales. Esos dos ministerios quedarán vacantes a partir de diciembre.
Pero además, son candidatos a legisladores provinciales Baldomero “Cacho” Álvarez (Desarrollo Social), Martín Ferré (Producción) y Ariel Franetovich (Asuntos Agrarios). Todos, según Scioli, irán a la Legislatura y otros tres ministerios bonaerenses sufrirán así un cambio de mando en el posible segundo mandato sciolista.
Pero por encima de estos cambios, asoman las profundas modificaciones en la estructura ministerial que propone el Plan de Regionalización de Montoya, que Scioli pidió tener antes de fin de año pero que, debido al difícil cierre de listas, difícilmente será aprobado con la actual conformación de la Legislatura.
En una entrevista con La Política Online, Montoya habló en su momento de lo significarán estos cambios en los ministerios y adelantó que “está en la naturaleza humana resistirse a los cambios”.
El titular del Grupo Bapro dijo que “Habrá quienes se pongan nerviosos o que opongan resistencia. Sin embargo yo no estoy preocupado por los funcionarios, sí me preocupa una cosa poco definida que podríamos llamar como una máquina de impedir o como los intereses de las corporaciones que se instalan alrededor de un poder centralizado”.
Un cargo para Montoya
Como sea, desde el entorno de Montoya negaron a LPO que el funcionario busque encabezar un ministerio, pero admiten que “debe ocupar un lugar donde pueda tener herramientas para llevar a cabo la transformación que Scioli demanda”.
Sin embargo, descartan las versiones que lo ubican en el ministerio de Producción porque, según dicen, “es sólo un sello”.
Respecto a la posible designación de Otero al frente de Economía no la confirman pero tampoco la desmienten. “Otero puede ser ministro de economía pero puede ser otra cosa”, dicen cerca del ex recaudador. (La Política OnLine).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario