LUJAN, Febrero 21, (PUNTO CERO-El Civismo) Pesa sobre él un sumario interno y una denuncia penal por un cabezazo que recibió el funcionario Julio García. Sin embargo, Enrique Peñalba dijo que no lo agredió.
Como ocurrió en octubre de 2006 después de una bochornosa sesión del Concejo, afirmó que “lo provocaron y lo insultaron”.
Según su parecer “de entrada había algo así como ‘a Peñalba lo tenemos que voltear’”.
El viernes pasado, el local del Sindicato de Trabajadores Municipales de Luján fue sede de un encuentro regional de la Federación de Sindicatos Municipales Bonaerenses (FESIMUBO). Estuvo presente, entre otros dirigentes, el diputado nacional y secretario general de ese organismo, Carlos Sluga. No fue casual –y así lo confirmó el secretario general de Luján, Enrique Peñalba- que la reunión se concretara en Luján. “Se busca un sitio que en ese momento tiene problemas”, admitió el gremialista.
El “problema” al que aludió Peñalba fue la agresión días atrás al director de Infraestructura Urbana, Julio García, a quien Peñalba le habría propinado un golpe por un simple “malentendido”.
EL CIVISMO aprovechó el encuentro para dialogar con Peñalba y conocer su versión de los hechos por los cuales fue sumariado y denunciado.
- ¿A qué se debe el encuentro regional en Luján?
- Es una reunión que se hace una vez cada semana y se busca el lugar que tiene algún problema o conflicto, con la idea de darle respaldo. Pero en la mayoría de los distritos hay problemas, aunque diferentes. Yo soy secretario de Previsión Social de la Federación de Sindicatos de Municipales Bonaerenses y entonces se hizo el encuentro aquí porque están conociendo el problema de Luján.
- ¿Qué planteó Luján en el marco del encuentro regional?
- Luján planteó que tenemos problemas, pero vamos conversando, negociando y sacándolos adelante. La intendenta quería o quiso dejar sin efecto algunos decretos, pero se conversó. Sabemos que hay gente que no podremos recuperar como trabajadora municipal, pero hay otros casos que sí los recuperamos. Charlamos con el secretario de Gobierno y quedamos con Humberto Guibaud en dialogar, hace algunos días, sobre un aumento de sueldo para todos los trabajadores municipales. Pero no pudimos hablar porque surgieron problemas, pasaron otras cosas.
También la intendenta nos había dicho que íbamos a poder revisar los decretos de designaciones y los concursos, pero no nos llamaron en ningún momento. Sólo con Guibaud charlamos de algún caso en particular. Y de los contratos y concursos finalmente no pudimos hablar sentados en una mesa, sino que echaban a uno y estábamos detrás de ese; echaban a otro y pasaba lo mismo. No es la forma.
- En su sindicato, ¿tienen una estimación sobre la cantidad de gente que quedaría cesante?
- No, porque ellos a nosotros no nos dijeron nada. Por eso estamos detrás de cada uno que queda cesante. Queremos saber cuánta gente. Le aclaramos a la señora intendenta que no íbamos a respaldar a ningún vago y ningún plantel político. Pero sí a los compañeros contratados, que trabajaban y que es fehaciente su tarea. Estábamos de acuerdo con algunas cosas que planteó la intendenta. Pero queríamos ser partícipes de la negociación, de la revisión. No pretendemos ser cogobernantes, porque ella lo dijo, y no tenemos intenciones ni queremos eso. Queremos colaborar en no poner palos en la rueda. Hasta ahora no hemos convocado a nada, a pesar de haber tenido como 150 pasantes que en diciembre se quedaron sin trabajo. Antes de cualquier conflicto, vamos a conversar, negociar. En lo que menos interés tenemos es en hacer conflicto y sacar la gente a la calle. Antes, conversar.
- Esto que usted describe se complicó la semana pasada por lo que ocurrió con García.
- Se complicó con el tema de García. Si querés te comento. Hubo un malentendido por un permiso gremial, que lo teníamos firmado por Guibaud y el director de Recursos Humanos. No habían llevado la nota a todos los lugares avisando del permiso gremial. Me comunican que no estaba ese permiso en el Taller Nº 1, de donde tenían que venir dos compañeros. García dijo que si no tenía la orden no dejaba venir a nadie. Pero dos días antes habíamos avisado por nota. Me fui a hablar con Guibaud y me encuentro que García cruza en diagonal la plaza, me grita, me trata de patotero, de negro de mierda y que a nosotros había que matarnos a todos. Él hizo una denuncia, pero yo también, porque creo que me corresponde. Creí que no iba de ese entredicho, pero lo llevó a la intendenta y a una denuncia.
- Él acusó un cabezazo de su parte.
- Él acusa un cabezazo. Yo no le pego en ningún momento. El que me agrede es él, se me vino encima. Y están los mismos testigos que él puso. Él me pegó el cabezazo, pero lamentablemente para él no sé si se golpeó la nariz o la frente. A mí me pegó en la frente, pero no me hizo nada. Inmediatamente fui a hablar con Guibaud para decirle qué era lo que había pasado. Hablé, vine al sindicato y después me enteré de la denuncia y de un sumario.
- Hoy por hoy usted está sumariado
- Sí, hay un sumario. Se corrigió el procedimiento inicial. Me llamaron y yo no tengo problema en ir a declarar. Ya tengo la declaración, pero primero tenía 5 días para hacerla y me llamaron para decirme que todavía no tengo que ir. No tengo problema en decir cuál es mi verdad. Creo que el sumario sigue en pie.
- ¿Cree que su situación se complica por ser identificado con Miguel Prince?
- Creo que de entrada había algo así como ‘a Peñalba lo tenemos que voltear, lo tenemos que sacar’. Yo estoy identificado con Prince, soy amigo de Prince y eso nadie me lo va a cambiar. El único que dirá mañana si no soy más amigo de Prince seré yo o Prince. Porque hay un problema de por medio, pero yo me conozco con Miguel desde pibe. Acá hubo una forma de buscarme y de querer perjudicarme. Estoy totalmente seguro que buscaron perjudicarme personalmente. Por eso me dijeron un montón de agravios. Pero es información que ya tiene mi abogado y yo me voy a defender. Todos tenemos derecho a la Justicia, no solamente el poderoso.
- Usted recién les dijo a sus compañeros que “hay provocadores” pero que usted tiene “sangre en las venas”. ¿Es eso lo que le genera problemas?
- Exactamente, porque no soy una persona que si me buscan o me vienen a agredir me voy a callar la boca. Creo que cualquier persona que va por cualquier lugar y es atacado o provocado, se va a defender. Yo me voy a defender.
- ¿Se arrepiente de algo?
Como ocurrió en octubre de 2006 después de una bochornosa sesión del Concejo, afirmó que “lo provocaron y lo insultaron”.
Según su parecer “de entrada había algo así como ‘a Peñalba lo tenemos que voltear’”.
El viernes pasado, el local del Sindicato de Trabajadores Municipales de Luján fue sede de un encuentro regional de la Federación de Sindicatos Municipales Bonaerenses (FESIMUBO). Estuvo presente, entre otros dirigentes, el diputado nacional y secretario general de ese organismo, Carlos Sluga. No fue casual –y así lo confirmó el secretario general de Luján, Enrique Peñalba- que la reunión se concretara en Luján. “Se busca un sitio que en ese momento tiene problemas”, admitió el gremialista.
El “problema” al que aludió Peñalba fue la agresión días atrás al director de Infraestructura Urbana, Julio García, a quien Peñalba le habría propinado un golpe por un simple “malentendido”.
EL CIVISMO aprovechó el encuentro para dialogar con Peñalba y conocer su versión de los hechos por los cuales fue sumariado y denunciado.
- ¿A qué se debe el encuentro regional en Luján?
- Es una reunión que se hace una vez cada semana y se busca el lugar que tiene algún problema o conflicto, con la idea de darle respaldo. Pero en la mayoría de los distritos hay problemas, aunque diferentes. Yo soy secretario de Previsión Social de la Federación de Sindicatos de Municipales Bonaerenses y entonces se hizo el encuentro aquí porque están conociendo el problema de Luján.
- ¿Qué planteó Luján en el marco del encuentro regional?
- Luján planteó que tenemos problemas, pero vamos conversando, negociando y sacándolos adelante. La intendenta quería o quiso dejar sin efecto algunos decretos, pero se conversó. Sabemos que hay gente que no podremos recuperar como trabajadora municipal, pero hay otros casos que sí los recuperamos. Charlamos con el secretario de Gobierno y quedamos con Humberto Guibaud en dialogar, hace algunos días, sobre un aumento de sueldo para todos los trabajadores municipales. Pero no pudimos hablar porque surgieron problemas, pasaron otras cosas.
También la intendenta nos había dicho que íbamos a poder revisar los decretos de designaciones y los concursos, pero no nos llamaron en ningún momento. Sólo con Guibaud charlamos de algún caso en particular. Y de los contratos y concursos finalmente no pudimos hablar sentados en una mesa, sino que echaban a uno y estábamos detrás de ese; echaban a otro y pasaba lo mismo. No es la forma.
- En su sindicato, ¿tienen una estimación sobre la cantidad de gente que quedaría cesante?
- No, porque ellos a nosotros no nos dijeron nada. Por eso estamos detrás de cada uno que queda cesante. Queremos saber cuánta gente. Le aclaramos a la señora intendenta que no íbamos a respaldar a ningún vago y ningún plantel político. Pero sí a los compañeros contratados, que trabajaban y que es fehaciente su tarea. Estábamos de acuerdo con algunas cosas que planteó la intendenta. Pero queríamos ser partícipes de la negociación, de la revisión. No pretendemos ser cogobernantes, porque ella lo dijo, y no tenemos intenciones ni queremos eso. Queremos colaborar en no poner palos en la rueda. Hasta ahora no hemos convocado a nada, a pesar de haber tenido como 150 pasantes que en diciembre se quedaron sin trabajo. Antes de cualquier conflicto, vamos a conversar, negociar. En lo que menos interés tenemos es en hacer conflicto y sacar la gente a la calle. Antes, conversar.
- Esto que usted describe se complicó la semana pasada por lo que ocurrió con García.
- Se complicó con el tema de García. Si querés te comento. Hubo un malentendido por un permiso gremial, que lo teníamos firmado por Guibaud y el director de Recursos Humanos. No habían llevado la nota a todos los lugares avisando del permiso gremial. Me comunican que no estaba ese permiso en el Taller Nº 1, de donde tenían que venir dos compañeros. García dijo que si no tenía la orden no dejaba venir a nadie. Pero dos días antes habíamos avisado por nota. Me fui a hablar con Guibaud y me encuentro que García cruza en diagonal la plaza, me grita, me trata de patotero, de negro de mierda y que a nosotros había que matarnos a todos. Él hizo una denuncia, pero yo también, porque creo que me corresponde. Creí que no iba de ese entredicho, pero lo llevó a la intendenta y a una denuncia.
- Él acusó un cabezazo de su parte.
- Él acusa un cabezazo. Yo no le pego en ningún momento. El que me agrede es él, se me vino encima. Y están los mismos testigos que él puso. Él me pegó el cabezazo, pero lamentablemente para él no sé si se golpeó la nariz o la frente. A mí me pegó en la frente, pero no me hizo nada. Inmediatamente fui a hablar con Guibaud para decirle qué era lo que había pasado. Hablé, vine al sindicato y después me enteré de la denuncia y de un sumario.
- Hoy por hoy usted está sumariado
- Sí, hay un sumario. Se corrigió el procedimiento inicial. Me llamaron y yo no tengo problema en ir a declarar. Ya tengo la declaración, pero primero tenía 5 días para hacerla y me llamaron para decirme que todavía no tengo que ir. No tengo problema en decir cuál es mi verdad. Creo que el sumario sigue en pie.
- ¿Cree que su situación se complica por ser identificado con Miguel Prince?
- Creo que de entrada había algo así como ‘a Peñalba lo tenemos que voltear, lo tenemos que sacar’. Yo estoy identificado con Prince, soy amigo de Prince y eso nadie me lo va a cambiar. El único que dirá mañana si no soy más amigo de Prince seré yo o Prince. Porque hay un problema de por medio, pero yo me conozco con Miguel desde pibe. Acá hubo una forma de buscarme y de querer perjudicarme. Estoy totalmente seguro que buscaron perjudicarme personalmente. Por eso me dijeron un montón de agravios. Pero es información que ya tiene mi abogado y yo me voy a defender. Todos tenemos derecho a la Justicia, no solamente el poderoso.
- Usted recién les dijo a sus compañeros que “hay provocadores” pero que usted tiene “sangre en las venas”. ¿Es eso lo que le genera problemas?
- Exactamente, porque no soy una persona que si me buscan o me vienen a agredir me voy a callar la boca. Creo que cualquier persona que va por cualquier lugar y es atacado o provocado, se va a defender. Yo me voy a defender.
- ¿Se arrepiente de algo?
- No, no me puedo arrepentir de algo que no hice, porque no hice nada. No sé si me arrepiento. Lo que lamento es que nosotros teníamos una buena charla, la íbamos llevando, más allá de lo que pasaba, y se tiene que interrumpir. Pero la seguiremos llevando adelante, porque esto no quita que podamos seguir discutiendo por la mejora de los trabajadores municipales. (PUNTO CERO-El Civismo).
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