La presentación de un pedido de informes de Juan Pablo López y el concejal selvista encendieron las luces de alerta • Ambos ediles quieren números claros respecto a los empleados municipales.
Parece ser que la crisis del oficialismo llegó al HCD. Si bien Selva ha atravesado varias tormentas en el legislativo, la que se comenzó a formar este año ha sido más lenta que las anteriores pero –posiblemente- más peligrosa.
Si bien el Frente para la Victoria tiene un bloque de 10 sobre 18 concejales; tres de ellos son prestados. Juan Pablo López, Pablo Banchero y Mercedes Mazzochi ingresaron al legislativo por la colectora opositora y se unieron al bloque oficialista en el 2009; luego del acuerdo Selva-Zubeldía.
De los tres ediles, Mazzochi finalmente terminó siendo absorbida por el selvismo, máxime cuando el intendente le ofreció el tercer lugar de su lista.
López, es público, no acompañó la reelección de Selva y se sumó al Frente Mercedino quienes lo ubicaron como cabeza de lista de concejales. Similar es el caso de Banchero que se unió al Frente. Estos dos ediles han tenido una actitud pasiva: o sea no han puesto palos en la rueda de la gestión comunal. Contrario a lo que muchos pensaban –y a pesar de que ambos pueden dar vuelta la suerte del oficialismo- han acompañado con sus votos los proyectos que promovieron del oficialismo.
Pero es muy posible que en la sesión de esta noche se produzca un quiebre.
El viernes al mediodía el concejal Juan Pablo López ingresó un proyecto de resolución para que –a través de la oficina de personal- el ejecutivo informe cifras vinculadas a los trabajadores que tiene el municipio: cuántos contratados, cuántos jornalizados y destajistas; cuántos de planta permanente; cuántos se incorporaron este año; cuántos dejaron de prestar servicio este año y cuántas vacantes existen respecto a lo presupuestado.
Si bien la excusa del concejal es “realizar proyecciones relacionadas con los recursos y gastos, necesarias para el tratamiento del presupuesto municipal para el ejercicio venidero”; es claro que el concejal se ha hecho eco de un rumor instalado en los pasillos comunales sobre un ingreso desmesurado de personal.
Pero lo más llamativo de ese proyecto es que no solo lo firma Juan Pablo López. Sino que a la derecha del joven edil está estampado la rúbrica del concejal Carlos Ludueña hombre que lleva casi ocho años ininterrumpidos como edil oficialista. Pero no solo eso: en más de una ocasión ha demostrado su férrea vocación de defensor del intendente como fue en el caso de la interpelación que fue él uno de sus mayores opositores y quien cuestionó el mecanismo por ser ‘inconstitucional’.
Fue precisamente esa y otras muestras de lealtad la que convencieron al intendente de renovarle la banca en el 2007 colocándolo en el segundo lugar. Ludueña no era puro de su agrupación sino que había llegado a la lista de Selva en el 2003 tras el acuerdo que el actual intendente selló con Juan Bertera referente de la agrupación ubicada por entonces en 25 esquina 34.
En el bloque oficialista se armó un revuelo interesante cuando vieron la firma de Ludueña en el libelo. López le adelantó al presidente del bloque, Marcelo Denápole, que su idea es pedir su tratamiento en la sesión de este lunes, a pesar de que no está en el orden del día. Hay que ver cómo reaccionan los demás. (El Nuevo Cronista).
Parece ser que la crisis del oficialismo llegó al HCD. Si bien Selva ha atravesado varias tormentas en el legislativo, la que se comenzó a formar este año ha sido más lenta que las anteriores pero –posiblemente- más peligrosa.
Si bien el Frente para la Victoria tiene un bloque de 10 sobre 18 concejales; tres de ellos son prestados. Juan Pablo López, Pablo Banchero y Mercedes Mazzochi ingresaron al legislativo por la colectora opositora y se unieron al bloque oficialista en el 2009; luego del acuerdo Selva-Zubeldía.
De los tres ediles, Mazzochi finalmente terminó siendo absorbida por el selvismo, máxime cuando el intendente le ofreció el tercer lugar de su lista.
López, es público, no acompañó la reelección de Selva y se sumó al Frente Mercedino quienes lo ubicaron como cabeza de lista de concejales. Similar es el caso de Banchero que se unió al Frente. Estos dos ediles han tenido una actitud pasiva: o sea no han puesto palos en la rueda de la gestión comunal. Contrario a lo que muchos pensaban –y a pesar de que ambos pueden dar vuelta la suerte del oficialismo- han acompañado con sus votos los proyectos que promovieron del oficialismo.
Pero es muy posible que en la sesión de esta noche se produzca un quiebre.
El viernes al mediodía el concejal Juan Pablo López ingresó un proyecto de resolución para que –a través de la oficina de personal- el ejecutivo informe cifras vinculadas a los trabajadores que tiene el municipio: cuántos contratados, cuántos jornalizados y destajistas; cuántos de planta permanente; cuántos se incorporaron este año; cuántos dejaron de prestar servicio este año y cuántas vacantes existen respecto a lo presupuestado.
Si bien la excusa del concejal es “realizar proyecciones relacionadas con los recursos y gastos, necesarias para el tratamiento del presupuesto municipal para el ejercicio venidero”; es claro que el concejal se ha hecho eco de un rumor instalado en los pasillos comunales sobre un ingreso desmesurado de personal.
Pero lo más llamativo de ese proyecto es que no solo lo firma Juan Pablo López. Sino que a la derecha del joven edil está estampado la rúbrica del concejal Carlos Ludueña hombre que lleva casi ocho años ininterrumpidos como edil oficialista. Pero no solo eso: en más de una ocasión ha demostrado su férrea vocación de defensor del intendente como fue en el caso de la interpelación que fue él uno de sus mayores opositores y quien cuestionó el mecanismo por ser ‘inconstitucional’.
Fue precisamente esa y otras muestras de lealtad la que convencieron al intendente de renovarle la banca en el 2007 colocándolo en el segundo lugar. Ludueña no era puro de su agrupación sino que había llegado a la lista de Selva en el 2003 tras el acuerdo que el actual intendente selló con Juan Bertera referente de la agrupación ubicada por entonces en 25 esquina 34.
En el bloque oficialista se armó un revuelo interesante cuando vieron la firma de Ludueña en el libelo. López le adelantó al presidente del bloque, Marcelo Denápole, que su idea es pedir su tratamiento en la sesión de este lunes, a pesar de que no está en el orden del día. Hay que ver cómo reaccionan los demás. (El Nuevo Cronista).
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