Carlos Gorosito, de Saladillo, quien fuera presidente del Comité provincial. Denunció que Fatala le dijo que no le daría un peso por no ser oficialista. “Si me tienen a pan y agua voy a tener que hacer una huelga de hambre”.
El intendente de Saladillo, el radical Carlos Gorosito, cuestionó la reunión que Julio De Vido tuvo con los intendentes oficialistas y dijo que si el gobierno nacional no le envía fondos hará una huelga de hambre.
Gorosito, ex presidente del Comité bonaerense de la UCR e intendente desde 1991, denunció que el subsecretario de Obras Públicas, Abel Fatala, le dijo que el Gobierno no le iba a dar una obra por no ser oficialista.
“Le dije a Fatala que algún día se iba a dar vuelta la torta y yo no iba a actuar de la misma manera”, se diferenció el intendente radical, conocido por sus exitosas gestiones para conseguir obras en la Gobernación bonaerense.
Cerrada esa ventanilla sólo le queda golpear las puertas de la Casa Rosada, pero no tiene éxito. Mucho más cuando De Vido sólo recibe a los oficialistas.
“Cuando son reuniones institucionales, debería invitarse a todos los jefes comunales para conocer los programas universales. Lo que han hecho es una reunión con los intendentes del mismo palo y eso no está bien”, se quejó Gorosito, quien en octubre fue reelecto con holgura.
“No soy un tibio. Digo lo que tengo que decir y me atengo a las consecuencias. Esto que está ocurriendo no puede ser. Si invitan a los intendentes a una reunión, todos tenemos derecho a concurrir”, protestó.
Y amenazó: “Si el Gobierno le da más a algún intendente amigo, no me importa. Lo único que pido es que no nos tengan ‘a pan y agua’ a los demás. Si no, voy a tener que hacer una huelga de hambre”, dijo. (La Política OnLine).
El intendente de Saladillo, el radical Carlos Gorosito, cuestionó la reunión que Julio De Vido tuvo con los intendentes oficialistas y dijo que si el gobierno nacional no le envía fondos hará una huelga de hambre.
Gorosito, ex presidente del Comité bonaerense de la UCR e intendente desde 1991, denunció que el subsecretario de Obras Públicas, Abel Fatala, le dijo que el Gobierno no le iba a dar una obra por no ser oficialista.
“Le dije a Fatala que algún día se iba a dar vuelta la torta y yo no iba a actuar de la misma manera”, se diferenció el intendente radical, conocido por sus exitosas gestiones para conseguir obras en la Gobernación bonaerense.
Cerrada esa ventanilla sólo le queda golpear las puertas de la Casa Rosada, pero no tiene éxito. Mucho más cuando De Vido sólo recibe a los oficialistas.
“Cuando son reuniones institucionales, debería invitarse a todos los jefes comunales para conocer los programas universales. Lo que han hecho es una reunión con los intendentes del mismo palo y eso no está bien”, se quejó Gorosito, quien en octubre fue reelecto con holgura.
“No soy un tibio. Digo lo que tengo que decir y me atengo a las consecuencias. Esto que está ocurriendo no puede ser. Si invitan a los intendentes a una reunión, todos tenemos derecho a concurrir”, protestó.
Y amenazó: “Si el Gobierno le da más a algún intendente amigo, no me importa. Lo único que pido es que no nos tengan ‘a pan y agua’ a los demás. Si no, voy a tener que hacer una huelga de hambre”, dijo. (La Política OnLine).
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