EL INSTITUTO CULTURAL REPONE LA OPERA “AÍDA” EN EL TEATRO MUNICIPAL DE BAHÍA BLANCA.

BAHIA BLANCA, Agosto 17, (PUNTO CERO) El Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires presentará el domingo 20 de agosto a las 21, en el Teatro Municipal de Bahía Blanca, la reposición de la conocida ópera “Aída”, de Giuseppe Verdi.
La puesta en escena contará con la presencia de la Orquesta Sinfónica Provincial de Bahía Blanca, el Coro Estable (ambos dependientes del Instituto Cultural bonaerense), el Ballet Juvenil y alumnos de la Escuela de Danzas Clásicas. La dirección musical estará a cargo del maestro Gustavo Plis-Sterenberg, mientras que la tarea de dirección escénica correrá por cuenta de Kenia Gallego.
El espectáculo musical volverá a subir a escena los días martes 22, jueves 24 y sábado 26 de agosto. Estas presentaciones también se harán en el Teatro Municipal de Bahía Blanca a las 21 horas.
El elenco que participará en la reposición de este clásico musical está integrado por Ana María Siri y Graciela Iglesias (“Aída”), Elizabeth Cannes y Karina Di Virgilio (“Amneris”), Antonio Grieco y Carlos Duarte (“Radamés”), Guillermo Roabina (“Rey”), Marcelo Boluña (“Ramfis”), Enrique Gubert y Pablo Muñoz Barra (“Amonasro”) y Roberto Dellorusso (“Mensajero”). La obra contará con el auspicio de la empresa Profertil.
La maravillosa escenografía estará a cargo de Daniel Feijoo y el vestuario y la zapatería serán cedidos por el Teatro Argentino de la ciudad de La Plata, otro centro artístico dependiente del Instituto Cultural bonaerense.
“Aída” es la vigésimo cuarta y antepenúltima ópera de Giuseppe Verdi. En esta obra el discurso musical verdiano conjuga elementos y progresos que ya venían dándose en sus anteriores creaciones para la lírica, como la sustitución de números sueltos por largas escenas unificadas, una instrumentación mucho más trabajada y la utilización - aunque no sistemática – del recurso de “Leit Motiv”. En “Aída” cada melodía expresa la situación dramática y refleja estados de ánimo de personajes específicos. Desaparecen por completo los acompañamientos simples y la orquesta pasa a tener un rol muy destacado. (PUNTO CERO).