(La Política OnLine). El ex presidente comenzó a reclutar dirigentes del PJ enfrentados al intendente kirchnerista, que hizo una pésima elección en junio. El diputado provincial electo Gustavo Ferri, yerno de Duhalde pero cercano a De Narváez, colabora con el aporte de concejales de Unión Pro. Quienes estuvieron y qué se habló en la cumbre secreta.
Un contingente de dirigentes peronistas de Lanús enemistados con el intendente del distrito, Darío Díaz Pérez, se reunieron con el ex presidente Eduardo Duhalde para armar una mesa de conducción, de la que quieren que surja un candidato a jefe comunal para 2011.
Fue una de las primeras movidas desestabilizadoras del lomense, luego de que anunciara que buscará liderar el partido y enfrentar en una interna abierta al ex presidente Néstor Kirchner. Ajetreado por sus conflictos internos, Díaz Pérez confía en un triunfar en una interna abierta.
Sus principales detractores dentro del peronismo blanquearon sus intenciones en una reunión que un selecto grupo de 35 dirigentes bonaerenses tuvo con Duhalde en su quinta de San Vicente, para definir los detalles de la Confederación de Agrupaciones Peronistas que impulsa el lomense. Allí asistieron los lanusenses Marcelina Pérez de Ibarra, diputada provincial con mandato hasta el 10 de diciembre; el ex senador Manuel Lozano y el dirigente Marcos Montenegro.
Pero la sorpresa llegó cuando el diputado provincial electo Gustavo Ferri, yerno del ex presidente pero actual ladero de Francisco de Narváez, ingresó al encuentro junto a los concejales de Unión PRO Gabriel Di Masi y Cristian Bossio y al edil electo Martín Sosa, todos de Lanús. No fue un dato menor: en las elecciones legislativas de junio, Unión Pro, que llevó lista única, disputó voto a voto con Díaz Pérez, quien fue testimonial por el kirchnerismo.
Esta visita cayó muy mal en el denarvaísmo local, sobre todo a su máximo referente, Roberto “Chirola” Díaz, porque sus representantes en el Concejo Deliberante cada vez se alejan más de su conducción y esto hace peligrar sus aspiraciones a ser candidato a intendente en 2011.
Tras el encuentro con Duhalde, el ex senador Manuel Lozano aseguró que el dariismo local no podrá ganar una interna en Lanús, ya que su gestión "está muy desgastada". “La pata de potro no es para todos, por eso creo que la gestión municipal le queda muy grande al intendente y esto lo ve la comunidad ya que en dos años tuvo más problemas que Manuel Quindimil en una década. Para mí, Díaz Pérez como intendente es muy buen dentista”, ironizó en diálogo con La Política On Line el ex legislador bonaerense.
La otra pata del peronismo no kirchnrista que tiene grandes posibilidades de disputarle una interna al intendente es la encabezada por José Luís Bianchi, ex secretario de Gobierno del por décadas intendente Manuel Quindimil. Bianchi, que se alejó del Frente de Unidad Peronista de Marcelina Pérez de Ibarra, cuenta con el respaldo de Felipe Solá para pelear por la intendencia.
Una muestra fue el apoyo que le brindaron públicamente el secretario general de la Federación Argentina de Petroleros y Gas Privados de Avellaneda, Alberto Roberti, y su mujer y diputada provincial electa Mónica Lopéz, aliados de Solá. “Es el mejor referente del peronismo de Lanús para pelear en 2011”, dijeron la semana pasada. Pero las puertas del duhaldismo están cerradas para la ex mano derecha de Quindimil, y en la mesa de conducción dirigida por Lozano e Ibarra advirtieron que “Bianchi fue un secretario de Gobierno inepto”.
Díaz Pérez afronta un torbellino social
Uno de los hechos que más preocupa al oficialismo de Lanús es como garantizar la gobernabilidad en 2010, sobre todo luego de los diversos inconvenientes que tiene la gestión del intendente Darío Díaz Pérez. Y la problemática social es el tema en el cual ha quedado muy expuesta su debilidad.
En las últimas horas, la gestión de Darío Díaz Pérez volvió a ubicarse en el ojo del huracán. Primero la Justicia intimó al jefe comunal a devolver los 2.270.000 de pesos que la Nación destinó al municipio para realizar un muro perimetral en zona conocida como “la franja de Acuba” (predio que pertenece a la Asociación de Curtidores de la Provincia de Buenos Aires y que fue tomado por vecinos en marzo de este año).
Esa zona fue la que desató justo antes del cierre de listas, el pasado 8 de mayo, la toma del Palacio Municipal encabezada por el “Monito” Rodríguez y el posterior enfrentamiento entre vecinos y ocupas que terminó con la vida de un joven de 16 años.
En efecto, el dinero se entregó a Díaz Pérez pero la obra nunca comenzó y esto desembocó en una reunión en el segundo piso de la Municipalidad de Lanús en la cual se le "pasó factura" al actual Secretario de Planificación Urbana, Obras Públicas y Servicios de la Municipalidad, Gerardo López Arrojo. Por este hecho hay rumores de posibles cambios en el gabinete local en el corto plazo.
Otro tema social que compromete a la comuna es la venta de mercadería destinada a planes sociales por parte de un funcionario local. Un medio nacional realizó una cámara oculta al Inspector de Relaciones Vecinales de Lanús, Eliseo García, y descubrió que él recibía bolsones de alimentos y luego los comercializaba a 10 pesos en el barrio lanusense de Villa Jardín.
Este hombre, que al ser funcionario tenía un sueldo superior a los 3 mil pesos, no conforme con esto, además sustraía los alimentos más onerosos (por ejemplo aceites), para venderlos en su propia almacén.
Ante esta grave denuncia, desde el oficialismo local destacaron que "ya se inició un sumario en contra de García", pero ahora la Secretaría de Políticas Sociales y Derechos Humanos está en la mira del intendente.
Cabe recordar que hasta hace un mes la titular de esta cartera era la misma mujer de Darío Díaz Pérez, Karina Nazabal, pero ella decidió tomarse una licencia en su cargo para poder ponerse al tanto a la actividad legislativa ya que el 10 de diciembre asume como diputada provincial.
De este modo, si el jefe comunal quiere ser reelecto en 2011 primero tiene que soportar el torbellino social que se le asoma a finales de 2009 y los que deberá sortear en 2010.
Un contingente de dirigentes peronistas de Lanús enemistados con el intendente del distrito, Darío Díaz Pérez, se reunieron con el ex presidente Eduardo Duhalde para armar una mesa de conducción, de la que quieren que surja un candidato a jefe comunal para 2011.
Fue una de las primeras movidas desestabilizadoras del lomense, luego de que anunciara que buscará liderar el partido y enfrentar en una interna abierta al ex presidente Néstor Kirchner. Ajetreado por sus conflictos internos, Díaz Pérez confía en un triunfar en una interna abierta.
Sus principales detractores dentro del peronismo blanquearon sus intenciones en una reunión que un selecto grupo de 35 dirigentes bonaerenses tuvo con Duhalde en su quinta de San Vicente, para definir los detalles de la Confederación de Agrupaciones Peronistas que impulsa el lomense. Allí asistieron los lanusenses Marcelina Pérez de Ibarra, diputada provincial con mandato hasta el 10 de diciembre; el ex senador Manuel Lozano y el dirigente Marcos Montenegro.
Pero la sorpresa llegó cuando el diputado provincial electo Gustavo Ferri, yerno del ex presidente pero actual ladero de Francisco de Narváez, ingresó al encuentro junto a los concejales de Unión PRO Gabriel Di Masi y Cristian Bossio y al edil electo Martín Sosa, todos de Lanús. No fue un dato menor: en las elecciones legislativas de junio, Unión Pro, que llevó lista única, disputó voto a voto con Díaz Pérez, quien fue testimonial por el kirchnerismo.
Esta visita cayó muy mal en el denarvaísmo local, sobre todo a su máximo referente, Roberto “Chirola” Díaz, porque sus representantes en el Concejo Deliberante cada vez se alejan más de su conducción y esto hace peligrar sus aspiraciones a ser candidato a intendente en 2011.
Tras el encuentro con Duhalde, el ex senador Manuel Lozano aseguró que el dariismo local no podrá ganar una interna en Lanús, ya que su gestión "está muy desgastada". “La pata de potro no es para todos, por eso creo que la gestión municipal le queda muy grande al intendente y esto lo ve la comunidad ya que en dos años tuvo más problemas que Manuel Quindimil en una década. Para mí, Díaz Pérez como intendente es muy buen dentista”, ironizó en diálogo con La Política On Line el ex legislador bonaerense.
La otra pata del peronismo no kirchnrista que tiene grandes posibilidades de disputarle una interna al intendente es la encabezada por José Luís Bianchi, ex secretario de Gobierno del por décadas intendente Manuel Quindimil. Bianchi, que se alejó del Frente de Unidad Peronista de Marcelina Pérez de Ibarra, cuenta con el respaldo de Felipe Solá para pelear por la intendencia.
Una muestra fue el apoyo que le brindaron públicamente el secretario general de la Federación Argentina de Petroleros y Gas Privados de Avellaneda, Alberto Roberti, y su mujer y diputada provincial electa Mónica Lopéz, aliados de Solá. “Es el mejor referente del peronismo de Lanús para pelear en 2011”, dijeron la semana pasada. Pero las puertas del duhaldismo están cerradas para la ex mano derecha de Quindimil, y en la mesa de conducción dirigida por Lozano e Ibarra advirtieron que “Bianchi fue un secretario de Gobierno inepto”.
Díaz Pérez afronta un torbellino social
Uno de los hechos que más preocupa al oficialismo de Lanús es como garantizar la gobernabilidad en 2010, sobre todo luego de los diversos inconvenientes que tiene la gestión del intendente Darío Díaz Pérez. Y la problemática social es el tema en el cual ha quedado muy expuesta su debilidad.
En las últimas horas, la gestión de Darío Díaz Pérez volvió a ubicarse en el ojo del huracán. Primero la Justicia intimó al jefe comunal a devolver los 2.270.000 de pesos que la Nación destinó al municipio para realizar un muro perimetral en zona conocida como “la franja de Acuba” (predio que pertenece a la Asociación de Curtidores de la Provincia de Buenos Aires y que fue tomado por vecinos en marzo de este año).
Esa zona fue la que desató justo antes del cierre de listas, el pasado 8 de mayo, la toma del Palacio Municipal encabezada por el “Monito” Rodríguez y el posterior enfrentamiento entre vecinos y ocupas que terminó con la vida de un joven de 16 años.
En efecto, el dinero se entregó a Díaz Pérez pero la obra nunca comenzó y esto desembocó en una reunión en el segundo piso de la Municipalidad de Lanús en la cual se le "pasó factura" al actual Secretario de Planificación Urbana, Obras Públicas y Servicios de la Municipalidad, Gerardo López Arrojo. Por este hecho hay rumores de posibles cambios en el gabinete local en el corto plazo.
Otro tema social que compromete a la comuna es la venta de mercadería destinada a planes sociales por parte de un funcionario local. Un medio nacional realizó una cámara oculta al Inspector de Relaciones Vecinales de Lanús, Eliseo García, y descubrió que él recibía bolsones de alimentos y luego los comercializaba a 10 pesos en el barrio lanusense de Villa Jardín.
Este hombre, que al ser funcionario tenía un sueldo superior a los 3 mil pesos, no conforme con esto, además sustraía los alimentos más onerosos (por ejemplo aceites), para venderlos en su propia almacén.
Ante esta grave denuncia, desde el oficialismo local destacaron que "ya se inició un sumario en contra de García", pero ahora la Secretaría de Políticas Sociales y Derechos Humanos está en la mira del intendente.
Cabe recordar que hasta hace un mes la titular de esta cartera era la misma mujer de Darío Díaz Pérez, Karina Nazabal, pero ella decidió tomarse una licencia en su cargo para poder ponerse al tanto a la actividad legislativa ya que el 10 de diciembre asume como diputada provincial.
De este modo, si el jefe comunal quiere ser reelecto en 2011 primero tiene que soportar el torbellino social que se le asoma a finales de 2009 y los que deberá sortear en 2010.
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