BUENOS AIRES, Octubre 25, (PUNTO CERO-Comunas) El diputado del ARI Carlos Raimundi, representa a la provincia de Buenos Aires y llegó a ser el precandidato a gobernador por ese distrito antes de que se formara la Coalición Cívica. Dice que Carrió cambió a Maffei por Bullrich y considera que las alianzas si son por acuerdos electorales no se justifican.¿Como hombre del ARI, Cómo está viviendo la conformación de la Coalición?
Es un poco difícil de entender. Yo no lo comparto. No lo compartí desde un primer momento, creo que los partidos políticos no son un obstáculo para el vínculo con la sociedad. Carrió lo ha planteado en términos de: “el partido me limita” y creo que los partidos que limitan son los partidos oligárquicos, los partidos cerrados, los que se estructuran a partir de aparatos y de prebendas, pero los partidos abiertos, los que trabajan día a día con la gente, que se alimentan de los partidos sociales, esos no solamente que no limitan el contacto con la sociedad sino que lo fortalecen. Por lo tanto creo que había que mantenerse y seguir desarrollando el ARI como una alternativa. Carrió no lo creyó así. Veo un giro en ella al pragmatismo. Antes planteaba: “no importa tardar, lo importante es ser coherente”. Veo un giro hacia un acuerdo con Telerman después de haberlo criticado. Observo un acuerdo con Patricia Bullrich que no expresa lo que fue históricamente el ARI. Un acercamiento a López Murphy que tampoco expresa mayoritariamente al ARI.
¿Y esto porqué está pasando, que le puede está pasando a Carrió?
No soy quien para interpretar estos fenómenos. Presumo que debe tener que ver una suerte de creencia en que si no era ahora, no era nunca.
¿Y usted cree que es ahora?
Creo que nadie gana en las vísperas. Nadie gana si no está consolidado. Nadie gana si no ofrece una alternativa coherente. Y aun así, cuando eso sucedió, que fue por ejemplo con la Alianza, así le fue al país. Cree que uno puede ganar sobre la base de acuerdos numéricos, sin unidad de concepción y sin la suficiente madurez de la fuerza política. En primer lugar no sucede y en segundo, en el caso de que sucediera, puede no ser bueno para la sociedad.
Si Carrió no hubiese hecho esta coalición y hubiese hecho desde el ARI alianzas con otros partidos, ¿lo hubieran visto diferente?
Si las alianzas hubieran sido consecuentes, si. Pero las alianzas son naturales en los partidos. ¿Con quienes eran originalmente nuestras alianzas del ARI en la provincia de Buenos Aires? Eran con los usuarios de los trenes en mal estado, en defensa de su derecho a viajar dignamente. Eran contra las víctimas de la contaminación en los ríos del gran Buenos Aires. Eran con quienes luchaban contra el Ceamse y la contaminación. Son alianzas naturales. Creo más en las alianzas con la sociedad que con los dirigentes. La gente está cansada.
¿Pero no son necesarias a veces?
No, no son necesarias. A veces se justifican si expresan alianzas sociales. Si son pura y principalmente acuerdos políticos o electorales no, no se justifican. Lo que uno cree que gana en términos de nombres, lo pierde en términos de coherencia.
Usted era precandidato a gobernador por la provincia por el ARI y tras esta situación se desdibujó la candidatura. ¿Que fue lo que pasó?
Ahí hubo una decisión política de Carrió de acordar con Margarita Stolbizer, quien tiene un discurso muy parecido al mío sobre la provincia de Buenos Aires, la diferencia que tenemos es que ella pretende, con los votos del ARI, recuperar el poder interno de la UCR. Creo que la UCR está históricamente agotada. Además, como yo puse muchos reparos en todo este proceso, ni Lilita Carrió quiso que yo siguiera siendo candidato, ni yo quise seguir siendo candidato de una construcción en la que no creo.
Suponiendo que no haya una victoria para estas elecciones, como va a quedar parada Elisa Carrió frente a la gente del ARI?
Yo noto muchísimas críticas, sobre todo sobre este último proceso, pero bueno, Carrió le plantea un poco a la gente que si no la vota ahora pierde su oportunidad, porque ella se retira de la política. Lo ha dicho más de una vez. Creo que Carrió es una mujer de palabra. Mejor dicho, ella hace un culto de su palabra, así que creo que deberá cumplirla.
¿Cree realmente que va a ser su última elección?
Es lo que ella ha dicho. Yo al contrario, soy mas amigo de tomar ejemplos históricos como el de Salvador Allende en Chile, como el de Francois Mitterrand, en Francia. Lula mismo en Brasil, Hermes Binner en Santa Fe o Richard Nixon, por tomar otro arco ideológico. Ellos han perdidos elecciones antes de triunfar. Soy amigo de procesos que van más allá de una o de dos elecciones. Carrió siempre nos inculcó eso, pero daría la impresión en el último tiempo que ella ha optado por el ahora o nunca.
¿Cree que puede haber ballotage?
La verdad que me parece una elección muy complicada porque hay un gobierno al que yo cuestiono y que no ha terminado con la matriz de saqueos del Estado, ni modificado esencialmente el patrón distributivo, que tiene niveles de corrupción grandes, pero frente al cual no se presentan en el horizonte alternativas creíbles. Es decir, una cosa es ser oposición y otra ser alternativa. Creo que hay varios candidatos de la oposición, pero que ninguno de ellos termina de ser una alternativa. Y esto lo digo en el sentido de que la gente los perciba como capaces de gobernar con sostenibilidad y con sustentabilidad. Es una elección complicada, no me gusta lo que hay, pero lo que se oferta como alternativa, me parece todavía insuficiente.
¿El ARI puede quedar herido después de todo esto?
El ARI está herido por la decisión de Carrió, en primer lugar de abandonarlo y en segundo lugar por su giro ideológico.
¿Se sienten desplazados o cual sería el término, si es que hay alguno?
Bueno, creo que Carrió cambió el meridiano de sus amigos políticos. Con excepción de sus más cercanos colaboradores, ella cambió a Marta Maffei por Patricia Bullrich.
Patricia Bullrich pareciera que irrita bastante a la gente del ARI
Lo que pasa es que Patricia, y dejo al margen mi relación personal, es una persona que ha transitado por distintos carrilles políticos e ideológicos y no siempre coherentes entre si. Desde Duhalde a López Murphy. Desde Cavallo a De la Rua y ahora Carrió. Entonces eso le da mucha imprevisibilidad, pero bueno es el nuevo meridiano de amistades políticas que tiene. (PUNTO CERO-Comunas).
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