La intendenta Graciela Rosso despidió al director de Medio Ambiente, Santiago Hernández, por las denuncias de vuelcos ilegales en lugares no autorizados.
La intendenta Graciela Rosso encabezó una inspección en un predio cercano a El Ranquelino donde supuestamente una empresa de Buenos Aires arrojó desechos prohibidos. Allí, Rosso en persona pudo comprobar las denuncias realizadas por las firmas de tanques atmosféricos del partido de Luján. Además, los empresarios locales sostenían una connivencia entre Hernández y los autores de la presunta maniobra ilegal.
El operativo contó con dos patrulleros de Protección Ciudadana y otro de la Policía. Además, en el lugar se pudo observar a los funcionarios Eduardo Racedo, Héctor Ruffinelli y Ariel Gianzone. La empresa que habría descargado en el partido de Luján sería Cecyl, quien alquilaría el campo donde en estos momentos se realiza la inspección. Es un establecimiento de Categoría 1 y se dedica a procesar el rumen de la vaca. Además, en el volquete analizado se encontró grasa.
Los rumores de un posible despido comenzaron a tomar fuerza ayer por la mañana. Los propios funcionarios del gobierno admitían la situación y sostenían que Hernández tenía las horas contadas. Sin embargo, durante la tarde Rosso emitió un sorpresivo comunicado donde, entre otras cuestiones, ratificaba en sus funciones al director de Medio Ambiente.
En el escrito, el gobierno brindaba una explicación de los hechos. Al respecto, se informaba que el miércoles "fue recibida una denuncia que manifestaba la presencia del OPDS (Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible) en el ex frigorífico El Ranquelino, en donde se estaban produciendo vertidos en el interior de dicho establecimiento".
Según esa explicación, "en una visita al lugar, el director de Medio Ambiente no constató la presencia del organismo provincial pero sí registró la disposición de líquidos grasos en el lugar, el cual no está habilitado para dicho fin, dado que el mismo es un centro de reciclado mediante tecnología de compos de material ruminal". Sobre el final del comunicado, la Dirección de Prensa agregaba que en la tarde del jueves "se procedería a clausurar el predio por la recepción indebida de desechos y no se descartan otras acciones en relación con este hecho".
Pero la situación volvió a dar un vuelco inesperado. Tras la inspección de Rosso y las muestras tomadas para los análisis, la intendenta decidió el alejamiento del cuestionado director de Medio Ambiente.
(Fuente: EL Civismo).
La intendenta Graciela Rosso encabezó una inspección en un predio cercano a El Ranquelino donde supuestamente una empresa de Buenos Aires arrojó desechos prohibidos. Allí, Rosso en persona pudo comprobar las denuncias realizadas por las firmas de tanques atmosféricos del partido de Luján. Además, los empresarios locales sostenían una connivencia entre Hernández y los autores de la presunta maniobra ilegal.
El operativo contó con dos patrulleros de Protección Ciudadana y otro de la Policía. Además, en el lugar se pudo observar a los funcionarios Eduardo Racedo, Héctor Ruffinelli y Ariel Gianzone. La empresa que habría descargado en el partido de Luján sería Cecyl, quien alquilaría el campo donde en estos momentos se realiza la inspección. Es un establecimiento de Categoría 1 y se dedica a procesar el rumen de la vaca. Además, en el volquete analizado se encontró grasa.
Los rumores de un posible despido comenzaron a tomar fuerza ayer por la mañana. Los propios funcionarios del gobierno admitían la situación y sostenían que Hernández tenía las horas contadas. Sin embargo, durante la tarde Rosso emitió un sorpresivo comunicado donde, entre otras cuestiones, ratificaba en sus funciones al director de Medio Ambiente.
En el escrito, el gobierno brindaba una explicación de los hechos. Al respecto, se informaba que el miércoles "fue recibida una denuncia que manifestaba la presencia del OPDS (Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible) en el ex frigorífico El Ranquelino, en donde se estaban produciendo vertidos en el interior de dicho establecimiento".
Según esa explicación, "en una visita al lugar, el director de Medio Ambiente no constató la presencia del organismo provincial pero sí registró la disposición de líquidos grasos en el lugar, el cual no está habilitado para dicho fin, dado que el mismo es un centro de reciclado mediante tecnología de compos de material ruminal". Sobre el final del comunicado, la Dirección de Prensa agregaba que en la tarde del jueves "se procedería a clausurar el predio por la recepción indebida de desechos y no se descartan otras acciones en relación con este hecho".
Pero la situación volvió a dar un vuelco inesperado. Tras la inspección de Rosso y las muestras tomadas para los análisis, la intendenta decidió el alejamiento del cuestionado director de Medio Ambiente.
(Fuente: EL Civismo).
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