"Al pueblo santafesino no le gusta que maltraten a su gobernador ”, dijo Carlos Reutemann ayer después de emitir su voto en Llambi Campbell, el pueblo ubicado a 60 kilómetros al norte de la capital santafesina en donde tiene su campo.
Las últimas apariciones públicas del senador nacional provocaron temblores en todo el arco político. Su decisión de no participar en las internas partidarias y de no apoyar explícitamente a ningún candidato del PJ santafesino, se sumaron, más tarde, a sus declaraciones despegándose del kirchnerismo.
Ayer agregó otro capítulo más al decir que mantiene “conversaciones con Eduardo Duhalde” y que le daría su “apoyo para las primarias de agosto”.
Lole aprovechó la oportunidad luego de votar –a las 8.30 y frente a las cámaras de TN– para criticar a la presidenta Cristina Kirchner y, más precisamente, a la estrategia de la mandataria en la elección santafesina. “ En los dos actos que estuvo en la provincia de Santa Fe no lo dejó hablar al gobernador. Primero fue el día de la Bandera y después el martes previo a estas elecciones en Puerto San Martín, volvió a maltratarlo. Esto a los santafesinos no nos gusta”, disparó el ex gobernador santafesino, de relación cimbreante con la familia Kirchner.
El ex corredor de F1 reconoció que Miguel Del Sel “fue muy pícaro en la interpretación de mi frase” , en referencia a sus declaraciones de esta semana, cuando declaró: “No soy kirchnerista, soy peronista”. El candidato a gobernador por el PRO lo había interpretado con términos futboleros: “Fue como un centro de Hauche a Palermo, o Niell, porque yo soy petisito”, bromeó.
Reutemann, que lleva varios años con bloque propio en el Senado, no pierde la oportunidad de despegarse y ampliar sus diferencias con el kirchnerismo cada vez que rompe sus prolongados silencios.
Sin embargo, esta tendencia parecía haber cambiado cuando el senador declaró después de la votación de las primarias en mayo que si lo llamaban acompañaría al ganador de la interna justicialista. El ganador fue el kirchnerista Agustín Rossi –con quien Reutemann se había enfrentado en las elecciones leguislativas de 2009– y el apoyo prometido nunca llegó.
Aquella declaración de Lole provocó la reacción de la mayoría de los productores agropecuarios de la provincia, que se cristalizó en un duro documento, en el que cuestionaban al ex gobernador su “cambio de actitud”. Le recordaban que en pleno conflicto del campo con el gobierno nacional, Lole se opuso a la resolución 125. La respuesta de Reutemann no se hizo esperar para calmar a los productores.
“No voy a defraudar a los hombres del campo, no voy a cambiar a todos aquellos que me votaron en el 2009, cuando le gané a todo y a todos”, avisó en un mensaje directo al electorado del interior santafesino.
Por eso, Reutemann que fue un gran tiempista en su época de piloto de la F1, volvió a dar una maniobra de sobrepaso en la última vuelta para estas elecciones a gobernador. Demostró su sello peronista por sobre el aparato del kirchnerismo y terminó ayudando a Miguel Del Sel a convertirse en la gran sorpresa de la elección del cuarto distrito del país. /clarin.com
Las últimas apariciones públicas del senador nacional provocaron temblores en todo el arco político. Su decisión de no participar en las internas partidarias y de no apoyar explícitamente a ningún candidato del PJ santafesino, se sumaron, más tarde, a sus declaraciones despegándose del kirchnerismo.
Ayer agregó otro capítulo más al decir que mantiene “conversaciones con Eduardo Duhalde” y que le daría su “apoyo para las primarias de agosto”.
Lole aprovechó la oportunidad luego de votar –a las 8.30 y frente a las cámaras de TN– para criticar a la presidenta Cristina Kirchner y, más precisamente, a la estrategia de la mandataria en la elección santafesina. “ En los dos actos que estuvo en la provincia de Santa Fe no lo dejó hablar al gobernador. Primero fue el día de la Bandera y después el martes previo a estas elecciones en Puerto San Martín, volvió a maltratarlo. Esto a los santafesinos no nos gusta”, disparó el ex gobernador santafesino, de relación cimbreante con la familia Kirchner.
El ex corredor de F1 reconoció que Miguel Del Sel “fue muy pícaro en la interpretación de mi frase” , en referencia a sus declaraciones de esta semana, cuando declaró: “No soy kirchnerista, soy peronista”. El candidato a gobernador por el PRO lo había interpretado con términos futboleros: “Fue como un centro de Hauche a Palermo, o Niell, porque yo soy petisito”, bromeó.
Reutemann, que lleva varios años con bloque propio en el Senado, no pierde la oportunidad de despegarse y ampliar sus diferencias con el kirchnerismo cada vez que rompe sus prolongados silencios.
Sin embargo, esta tendencia parecía haber cambiado cuando el senador declaró después de la votación de las primarias en mayo que si lo llamaban acompañaría al ganador de la interna justicialista. El ganador fue el kirchnerista Agustín Rossi –con quien Reutemann se había enfrentado en las elecciones leguislativas de 2009– y el apoyo prometido nunca llegó.
Aquella declaración de Lole provocó la reacción de la mayoría de los productores agropecuarios de la provincia, que se cristalizó en un duro documento, en el que cuestionaban al ex gobernador su “cambio de actitud”. Le recordaban que en pleno conflicto del campo con el gobierno nacional, Lole se opuso a la resolución 125. La respuesta de Reutemann no se hizo esperar para calmar a los productores.
“No voy a defraudar a los hombres del campo, no voy a cambiar a todos aquellos que me votaron en el 2009, cuando le gané a todo y a todos”, avisó en un mensaje directo al electorado del interior santafesino.
Por eso, Reutemann que fue un gran tiempista en su época de piloto de la F1, volvió a dar una maniobra de sobrepaso en la última vuelta para estas elecciones a gobernador. Demostró su sello peronista por sobre el aparato del kirchnerismo y terminó ayudando a Miguel Del Sel a convertirse en la gran sorpresa de la elección del cuarto distrito del país. /clarin.com
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