A instancias del Rotary Club de San Isidro, que preside Horacio Ceccotti, el ingeniero Luis María Migone fue elegido "Rotario del Año", premio instituido por el Ateneo de Estudios Rotarios, que será entregado en la Conferencia Anual del Distrito 4825, que tendrá lugar en Gral. Villegas (Buenos Aires) el 25 de Abril.
Migone abrevó en las aguas rotarias de su seno hogareño por la representación de su padre -también rotario-, todas las vivencias que ello implica y en el momento propicio de su carrera como ingeniero Civil.
Cuando se mudó a la localidad de Olivos, su amigo, el Dr. Alejandro Roca, lo presentó en la sede del Club Atlético de San Isidro a una reunión del Rotary Club de San Isidro con una cálida acogida atenta a la condición de ex rotario del Rotary Club de Buenos Aires.
Padrinazgo mediante de Alejandro Roca, fue aceptado por los colegas de aquella época el 22 de Octubre de 1974 y, dada la trayectoria anterior, comenzó a trabajar activamente munido de una convincente vocación de servicio, en la avenida del servicio a través de la ocupación.
En el año 1976 ejerció la presidencia y luego dirigió el boletín del Club, entre 1998 y 2004.
La creación de la Fundación del Rotary Club de San Isidro en 1991, obra de su inspiración y esfuerzo, con la participación de la totalidad de sus socios, marca un hito trascendente, dándole un fundamento Institucional a todas las actividades de servicio en el aspecto Educativo.
A partir de entonces el desarrollo ha sido progresivo con un aumento notable de becarios, ofreciendo a los mismos una cantidad de servicios, haciendo que las becas no sólo sean una asignación de dinero sino también una prestación de servicios al becario en términos de ayuda escolar, de prestación de servicios del banco ortopédico, servicios de biblioteca, servicios odontológicos, cuya resultante hace que hoy tengamos 50 becas, distribuidas 28 de ellas en institutos educacionales de gestión pública y las restantes a nivel privado.
Del nivel público 6 de esas becas, corresponden a becarios cursando en el nivel universitario y 1 de nivel terciario, en la Provincia de Jujuy, Abra Pampa, en el Instituto de Formación Docente de Nivel Inicial. En la Provincia de Salta, por gestiones del propio Luis, hay 2 becarias en el departamento de Santa Victoria. En San Isidro hay 2 becarias en la Cruz Roja que estudian enfermería.
Otra función destacada de la Fundación del Rotary Club de San Isidro la constituye la tarea de capacitación docente con un curso de alfabetización científica destinado a la escuela EGB Nº 26 del Bajo de San Isidro, desarrollado durante todo el 2006 incorporándose a él, el jardín de Infantes Nº 907.
También durante el año se lograron donaciones de 1.655 libros que fueron distribuidos en las escuelas del partido de San Isidro y en las escuelas de Salta que también son atendidas.
Concomitantemente la Fundación del Rotary Club de San Isidro propició la Jornada de Educación en Valores para la Paz, trasmitiendo a las docentes de Jardines de Infantes, la introducción de prácticas didácticas para educar a los chicos desde su más tierna edad en valores que permitan constituir improntas que le sirvan de guía para toda la vida.
La constante dedicación al servicio a la comunidad llevó a Luis María Migone a organizar y publicar el Primer Censo de Organizaciones de la Sociedad Civil de San Isidro, que determinó fehacientemente el verdadero estado de Instituciones de Servicio.
Su interés por la educación, lo llevó a gestionar y habilitar una Sala de Computación con 15 equipos informáticos, en la Escuela Nº 5 de Beccar. Para ello dirigió, por su clasificación, el reciclado del lugar físico para que los alumnos trabajen en un ámbito adecuado.
Su pasión por la enseñanza de las ciencias hizo que movilizará a todos sus colegas rotarios para proveer los fondos necesarios para la instalación de un laboratorio de ciencias biológicas en una escuela del barrio La Cava y la dotación de instrumental de astronomía y meteorología en la Escuela Nicolás Copérnico, donde los alumnos informan a la NASA y al Programa Globe de sus trabajos.
Promovió la participación de becarios en las Olimpíadas de Matemáticas Argentina
Participa anualmente de la evaluación y distinción a los alumnos de las Escuelas de San Isidro, y sus palabras dirigidas a la Comunidad Educativa son esperadas anualmente por su alto conocimiento de la problemática educacional.
A través de los aportes de los distintos colaboradores de la Fundación del Rotary Club de San Isidro, se proveyeron sillas ortopédicas a niños con capacidades diferentes, al Asilo de Ancianos Marín y a la Fundación María Cecilia para la atención del niño oncológico, a la que se asiste con regularidad en la provisión de distintos elementos que mejoran la calidad de vida de los pequeños.
En la actualidad, Migone es un ferviente y activo impulsor del Programa Mundo de Sonrisas, mediante el cual, con un convenio con la USAL e Instituciones Odontológicas, se asisten odontológicamente, todos los jueves, alumnos de Escuelas de San Isidro.
Luis M. Migone con sus 85 años demuestra con su humildad y alegría de espíritu que cientos de becarios a lo largo de toda su gestión, constituyen el mejor ejemplo de lo que puede brindar quién tenga auténtica vocación de servir.
Migone abrevó en las aguas rotarias de su seno hogareño por la representación de su padre -también rotario-, todas las vivencias que ello implica y en el momento propicio de su carrera como ingeniero Civil.
Cuando se mudó a la localidad de Olivos, su amigo, el Dr. Alejandro Roca, lo presentó en la sede del Club Atlético de San Isidro a una reunión del Rotary Club de San Isidro con una cálida acogida atenta a la condición de ex rotario del Rotary Club de Buenos Aires.
Padrinazgo mediante de Alejandro Roca, fue aceptado por los colegas de aquella época el 22 de Octubre de 1974 y, dada la trayectoria anterior, comenzó a trabajar activamente munido de una convincente vocación de servicio, en la avenida del servicio a través de la ocupación.
En el año 1976 ejerció la presidencia y luego dirigió el boletín del Club, entre 1998 y 2004.
La creación de la Fundación del Rotary Club de San Isidro en 1991, obra de su inspiración y esfuerzo, con la participación de la totalidad de sus socios, marca un hito trascendente, dándole un fundamento Institucional a todas las actividades de servicio en el aspecto Educativo.
A partir de entonces el desarrollo ha sido progresivo con un aumento notable de becarios, ofreciendo a los mismos una cantidad de servicios, haciendo que las becas no sólo sean una asignación de dinero sino también una prestación de servicios al becario en términos de ayuda escolar, de prestación de servicios del banco ortopédico, servicios de biblioteca, servicios odontológicos, cuya resultante hace que hoy tengamos 50 becas, distribuidas 28 de ellas en institutos educacionales de gestión pública y las restantes a nivel privado.
Del nivel público 6 de esas becas, corresponden a becarios cursando en el nivel universitario y 1 de nivel terciario, en la Provincia de Jujuy, Abra Pampa, en el Instituto de Formación Docente de Nivel Inicial. En la Provincia de Salta, por gestiones del propio Luis, hay 2 becarias en el departamento de Santa Victoria. En San Isidro hay 2 becarias en la Cruz Roja que estudian enfermería.
Otra función destacada de la Fundación del Rotary Club de San Isidro la constituye la tarea de capacitación docente con un curso de alfabetización científica destinado a la escuela EGB Nº 26 del Bajo de San Isidro, desarrollado durante todo el 2006 incorporándose a él, el jardín de Infantes Nº 907.
También durante el año se lograron donaciones de 1.655 libros que fueron distribuidos en las escuelas del partido de San Isidro y en las escuelas de Salta que también son atendidas.
Concomitantemente la Fundación del Rotary Club de San Isidro propició la Jornada de Educación en Valores para la Paz, trasmitiendo a las docentes de Jardines de Infantes, la introducción de prácticas didácticas para educar a los chicos desde su más tierna edad en valores que permitan constituir improntas que le sirvan de guía para toda la vida.
La constante dedicación al servicio a la comunidad llevó a Luis María Migone a organizar y publicar el Primer Censo de Organizaciones de la Sociedad Civil de San Isidro, que determinó fehacientemente el verdadero estado de Instituciones de Servicio.
Su interés por la educación, lo llevó a gestionar y habilitar una Sala de Computación con 15 equipos informáticos, en la Escuela Nº 5 de Beccar. Para ello dirigió, por su clasificación, el reciclado del lugar físico para que los alumnos trabajen en un ámbito adecuado.
Su pasión por la enseñanza de las ciencias hizo que movilizará a todos sus colegas rotarios para proveer los fondos necesarios para la instalación de un laboratorio de ciencias biológicas en una escuela del barrio La Cava y la dotación de instrumental de astronomía y meteorología en la Escuela Nicolás Copérnico, donde los alumnos informan a la NASA y al Programa Globe de sus trabajos.
Promovió la participación de becarios en las Olimpíadas de Matemáticas Argentina
Participa anualmente de la evaluación y distinción a los alumnos de las Escuelas de San Isidro, y sus palabras dirigidas a la Comunidad Educativa son esperadas anualmente por su alto conocimiento de la problemática educacional.
A través de los aportes de los distintos colaboradores de la Fundación del Rotary Club de San Isidro, se proveyeron sillas ortopédicas a niños con capacidades diferentes, al Asilo de Ancianos Marín y a la Fundación María Cecilia para la atención del niño oncológico, a la que se asiste con regularidad en la provisión de distintos elementos que mejoran la calidad de vida de los pequeños.
En la actualidad, Migone es un ferviente y activo impulsor del Programa Mundo de Sonrisas, mediante el cual, con un convenio con la USAL e Instituciones Odontológicas, se asisten odontológicamente, todos los jueves, alumnos de Escuelas de San Isidro.
Luis M. Migone con sus 85 años demuestra con su humildad y alegría de espíritu que cientos de becarios a lo largo de toda su gestión, constituyen el mejor ejemplo de lo que puede brindar quién tenga auténtica vocación de servir.
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