El escrutinio definitivo de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) del pasado domingo comenzó hoy en todas las provincias y, una vez concluido, definirá el segundo puesto que se disputan el radical Ricardo Alfonsín o el peronista Eduardo Duhalde.
El recuento, a cargo del juez electoral de cada distrito, consiste en la verificación de las actas de escrutinio de los presidentes de mesa conjuntamente con los fiscales de los partidos, quienes pueden realizar observaciones o reclamos en el caso de que detecten irregularidades.
En la Capital Federal el escrutinio se desarrolla en la Legislatura porteña a raíz de las refacciones que se realizan en el Congreso de la Nación y, según indicó la jueza federal María Servini de Cubría, estará finalizado la semana próxima.
Todo indica que poco más llevará el conteo en la Provincia de Buenos Aires, donde varios telegramas mostraron irregularidades, lo que contribuyó a que a nivel nacional no pudiera llegarse al 100 por ciento el escrutinio provisorio, que cerró finalmente en 96,84 por ciento.
El 3,16 por ciento que falta representa 2.715 mesas y su recuento terminará de definir si Alfonsín mantiene el segundo lugar o Duhalde pasa al frente.
De acuerdo a los datos del Ministerio del Interior, en Buenos Aires, principal distrito electoral del país, resta el escrutinio del 5,5 por ciento de las mesas, aunque la cifra se repite en varias provincias, especialmente en Misiones (llegó al 92 por ciento), San Luis (94,4 por ciento), Jujuy (96,3 por ciento), Formosa (96 por ciento) y Córdoba (97,9 por ciento).
Esa tendencia podría modificar el segundo puesto de Alfonsín, teniendo en cuenta que en principio sólo le saca a Duhalde 1.500 votos, por lo que la pulseada se trasladará a los apoderados de cada distrito.
En La Rioja, los apoderados de la UCR lograron recuperar 300 votos para la candidatura presidencial de Alfonsín, por lo que la distancia se estiró a 1.800 votos, aunque el duhalismo confía en que el mayor caudal de sufragios para el ex presidente están en Buenos Aires.
El recuento, a cargo del juez electoral de cada distrito, consiste en la verificación de las actas de escrutinio de los presidentes de mesa conjuntamente con los fiscales de los partidos, quienes pueden realizar observaciones o reclamos en el caso de que detecten irregularidades.
En la Capital Federal el escrutinio se desarrolla en la Legislatura porteña a raíz de las refacciones que se realizan en el Congreso de la Nación y, según indicó la jueza federal María Servini de Cubría, estará finalizado la semana próxima.
Todo indica que poco más llevará el conteo en la Provincia de Buenos Aires, donde varios telegramas mostraron irregularidades, lo que contribuyó a que a nivel nacional no pudiera llegarse al 100 por ciento el escrutinio provisorio, que cerró finalmente en 96,84 por ciento.
El 3,16 por ciento que falta representa 2.715 mesas y su recuento terminará de definir si Alfonsín mantiene el segundo lugar o Duhalde pasa al frente.
De acuerdo a los datos del Ministerio del Interior, en Buenos Aires, principal distrito electoral del país, resta el escrutinio del 5,5 por ciento de las mesas, aunque la cifra se repite en varias provincias, especialmente en Misiones (llegó al 92 por ciento), San Luis (94,4 por ciento), Jujuy (96,3 por ciento), Formosa (96 por ciento) y Córdoba (97,9 por ciento).
Esa tendencia podría modificar el segundo puesto de Alfonsín, teniendo en cuenta que en principio sólo le saca a Duhalde 1.500 votos, por lo que la pulseada se trasladará a los apoderados de cada distrito.
En La Rioja, los apoderados de la UCR lograron recuperar 300 votos para la candidatura presidencial de Alfonsín, por lo que la distancia se estiró a 1.800 votos, aunque el duhalismo confía en que el mayor caudal de sufragios para el ex presidente están en Buenos Aires.
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