Ediles de la oposición decidieron no presentarse a la sesión extraordinaria de ayer en la que se aprobaron las cuentas del 2010. El intendente dijo que “ellos sabrán por qué lo hacen” y que “cuando uno quiere trabajar puede abstenerse o disentir”. De todos modos remarcó: “El único órgano que me controla es el Tribunal de Cuentas”.
Ayer por la mañana, y tras el faltazo de la mayoría de los concejales opositores de Pilar, se aprobó por mayoría la Rendición de Cuentas del año 2010.
Y mientras los ediles presentes debatían en el recinto, el intendente Humberto Zúccaro opinó sobre la decisión de los opositores de no acudir a participar de la sesión extraordinaria.
En el marco de un acto de entrega de computadoras para alumnos de escuelas secundarias, Zúccaro señaló que la movida opositora “era sabida”, pero de todos modos aseguró que “cada uno de ellos sabrá por qué lo hace”.
Es que minutos antes de dar comienzo a la sesión, los concejales Gustavo Trindade y Sixto De Santo, de Peronismo Federal, Marcela Campagnoli, de la Coalición Cívica, Noemí Barrio, del Bloque Tres Banderas, y Silvana Aguilar, del duhaldismo, se reunieron en un bar céntrico y decidieron que no iban a participar de la sesión en la que se terminaron aprobando los números de la comuna del año pasado, en donde se registró un leve superávit de 1,9 millón de pesos, sobre un total de 445 millones de pesos recaudados y 443 millones gastados (ver aparte).
Esos concejales alegaron que les faltó tiempo para analizar las carpetas y acusaron al oficialismo de “estar apurados” para aprobarla.
En ese sentido, el intendente fue contundente con sus palabras y señaló que alegar cuestiones de tiempo para el análisis por parte de los concejales anti Z “es una excusa muy vulgar”.
“Que la oposición diga que no tuvo tiempo (para analizar la Rendición) es una excusa muy vulgar”, sentenció Zúccaro desde la Escuela 26.
Asimismo sostuvo que “hubiera sido importante un debate abierto y constructivo y que deje algunas cosas en positivo en el Legislativo”, aunque al mismo tiempo deslizó otras opciones de las que los ediles podrían haber hecho uso. “Cuando uno quiere trabajar, puede presentarse, abstenerse de votar, disentir y presentar proyectos alternativos”, analizó el jefe comunal.
Control
De todos modos, y pese al faltazo de casi toda la oposición – sólo se presentaron al debate Diego Ranieli y Marcelo Criniti, de Unión Pro, y Rosa Baíz, de Compromiso Cívico,- el intendente también se encargó de remarcar que “el único órgano” que lo controla es el Tribunal de Cuentas.
“Yo tengo un único órgano que me controla que es el Tribunal de Cuentas. La Rendición y el Presupuesto son herramientas del Ejecutivo que se tienen que presentar en el Legislativo, pero el órgano de control máximo es el Tribunal”, cerró el jefe comunal. (Pilar de Todos).
Ayer por la mañana, y tras el faltazo de la mayoría de los concejales opositores de Pilar, se aprobó por mayoría la Rendición de Cuentas del año 2010.
Y mientras los ediles presentes debatían en el recinto, el intendente Humberto Zúccaro opinó sobre la decisión de los opositores de no acudir a participar de la sesión extraordinaria.
En el marco de un acto de entrega de computadoras para alumnos de escuelas secundarias, Zúccaro señaló que la movida opositora “era sabida”, pero de todos modos aseguró que “cada uno de ellos sabrá por qué lo hace”.
Es que minutos antes de dar comienzo a la sesión, los concejales Gustavo Trindade y Sixto De Santo, de Peronismo Federal, Marcela Campagnoli, de la Coalición Cívica, Noemí Barrio, del Bloque Tres Banderas, y Silvana Aguilar, del duhaldismo, se reunieron en un bar céntrico y decidieron que no iban a participar de la sesión en la que se terminaron aprobando los números de la comuna del año pasado, en donde se registró un leve superávit de 1,9 millón de pesos, sobre un total de 445 millones de pesos recaudados y 443 millones gastados (ver aparte).
Esos concejales alegaron que les faltó tiempo para analizar las carpetas y acusaron al oficialismo de “estar apurados” para aprobarla.
En ese sentido, el intendente fue contundente con sus palabras y señaló que alegar cuestiones de tiempo para el análisis por parte de los concejales anti Z “es una excusa muy vulgar”.
“Que la oposición diga que no tuvo tiempo (para analizar la Rendición) es una excusa muy vulgar”, sentenció Zúccaro desde la Escuela 26.
Asimismo sostuvo que “hubiera sido importante un debate abierto y constructivo y que deje algunas cosas en positivo en el Legislativo”, aunque al mismo tiempo deslizó otras opciones de las que los ediles podrían haber hecho uso. “Cuando uno quiere trabajar, puede presentarse, abstenerse de votar, disentir y presentar proyectos alternativos”, analizó el jefe comunal.
Control
De todos modos, y pese al faltazo de casi toda la oposición – sólo se presentaron al debate Diego Ranieli y Marcelo Criniti, de Unión Pro, y Rosa Baíz, de Compromiso Cívico,- el intendente también se encargó de remarcar que “el único órgano” que lo controla es el Tribunal de Cuentas.
“Yo tengo un único órgano que me controla que es el Tribunal de Cuentas. La Rendición y el Presupuesto son herramientas del Ejecutivo que se tienen que presentar en el Legislativo, pero el órgano de control máximo es el Tribunal”, cerró el jefe comunal. (Pilar de Todos).
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