El sistema hidráulico porteño no resistió los 61 milímetros que cayeron entre las 3.30 y las 4 de la madrugada del domingo y la Ciudad colapsó. Desde el gobierno de Macri hablan del “cambio climático”, pero la oposición precisó que en la obra de los arroyos Vega y Medrano se devengaron cero pesos.
“Pido disculpas a los vecinos, la Ciudad sigue teniendo una capacidad de drenaje que no condice con las características avasallantes que sufrimos en todo el planeta por el cambio climático”, dijo Diego Santilli, el ministro de Espacio Público, horas después de la tormenta que provocó destrozos y anegamientos en el barrio de Belgrano.
Sin embargo, desde la oposición cruzaron al ministro y denunciaron "una injustificable subejecución en el plan de obras hídricas previsto para el año pasado”. Concretamente, en el plan de inversiones dispuesto para 2010 había una ficha de inversión, llamada Vega-Medrano referida al agua potable y al alcantarillado, que tenía un presupuesto de $7.361.850. De esa ficha, al día de hoy, se devengaron cero pesos.
“Es cierto que llovió mucho, pero más cierto y más grave es que no se hagan los trabajos que debían hacerse y para los cuales había dinero”, reclamó al respecto el ex jefe de Gobierno Jorge Telerman.
Sobre el programa de gestión de riesgo hídrico, de la primera ficha sólo se ejecutaron $2.623.555 de un presupuesto total de $6.482.992; y de la segunda ficha de inversión, sólo $87.000 de los $1.753.140 destinados. Números contundentes si se recuerda la campaña de Macri a Jefe de Gobierno, en la que se empapeló la ciudad con un afiche que decía: "Estaría bueno no inundarnos cada vez que llueve. Porque así nos estamos ahogando en un vaso de agua".
“Los barrios más afectados por las tormenta del domingo fueron Palermo, Belgrano, Villa Crespo; es decir, el sector perteneciente a la cuenca del arroyo Maldonado y a la cuenca del arroyo Vega y la calle Blanco Encalada y otras calles típicas que se vienen inundando", informó Daniel Russo, Director de Defensa Civil porteña.
El Arroyo Vega es un arroyo entubado que sigue su curso, en gran parte, bajo la calle Blanco Encalada y es propenso a desbordarse entre las calles Ciudad de la Paz y la avenida Cabildo. Sin reparos, el sitio oficial del gobierno porteño admite que en relación “al funcionamiento del sistema de desagües pluviales, en su estado actual, es posible señalar que existe insuficiencia de capacidad de captación por sumideros”.
Mientras las lluvias castigan a los vecinos de la Ciudad cada febrero, en el Gobierno porteño responden que están trabajando en su plan hidráulico. Puntualmente, anunciaron que en mayo se inaugurará el primero de los dos canales aliviadores del Maldonado. El segundo, de casi 10 kilómetros, estaría listo recién para el 2012.
Sobre la paralización de obras en los otros dos arroyos, el macrismo insiste en que el Gobierno nacional no les autoriza conseguir el financiamiento externo que permitiría avanzar con los trabajos de ampliación y desagües en el Medrano y el Vega. (La Política OnLine).
“Pido disculpas a los vecinos, la Ciudad sigue teniendo una capacidad de drenaje que no condice con las características avasallantes que sufrimos en todo el planeta por el cambio climático”, dijo Diego Santilli, el ministro de Espacio Público, horas después de la tormenta que provocó destrozos y anegamientos en el barrio de Belgrano.
Sin embargo, desde la oposición cruzaron al ministro y denunciaron "una injustificable subejecución en el plan de obras hídricas previsto para el año pasado”. Concretamente, en el plan de inversiones dispuesto para 2010 había una ficha de inversión, llamada Vega-Medrano referida al agua potable y al alcantarillado, que tenía un presupuesto de $7.361.850. De esa ficha, al día de hoy, se devengaron cero pesos.
“Es cierto que llovió mucho, pero más cierto y más grave es que no se hagan los trabajos que debían hacerse y para los cuales había dinero”, reclamó al respecto el ex jefe de Gobierno Jorge Telerman.
Sobre el programa de gestión de riesgo hídrico, de la primera ficha sólo se ejecutaron $2.623.555 de un presupuesto total de $6.482.992; y de la segunda ficha de inversión, sólo $87.000 de los $1.753.140 destinados. Números contundentes si se recuerda la campaña de Macri a Jefe de Gobierno, en la que se empapeló la ciudad con un afiche que decía: "Estaría bueno no inundarnos cada vez que llueve. Porque así nos estamos ahogando en un vaso de agua".
“Los barrios más afectados por las tormenta del domingo fueron Palermo, Belgrano, Villa Crespo; es decir, el sector perteneciente a la cuenca del arroyo Maldonado y a la cuenca del arroyo Vega y la calle Blanco Encalada y otras calles típicas que se vienen inundando", informó Daniel Russo, Director de Defensa Civil porteña.
El Arroyo Vega es un arroyo entubado que sigue su curso, en gran parte, bajo la calle Blanco Encalada y es propenso a desbordarse entre las calles Ciudad de la Paz y la avenida Cabildo. Sin reparos, el sitio oficial del gobierno porteño admite que en relación “al funcionamiento del sistema de desagües pluviales, en su estado actual, es posible señalar que existe insuficiencia de capacidad de captación por sumideros”.
Mientras las lluvias castigan a los vecinos de la Ciudad cada febrero, en el Gobierno porteño responden que están trabajando en su plan hidráulico. Puntualmente, anunciaron que en mayo se inaugurará el primero de los dos canales aliviadores del Maldonado. El segundo, de casi 10 kilómetros, estaría listo recién para el 2012.
Sobre la paralización de obras en los otros dos arroyos, el macrismo insiste en que el Gobierno nacional no les autoriza conseguir el financiamiento externo que permitiría avanzar con los trabajos de ampliación y desagües en el Medrano y el Vega. (La Política OnLine).
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